Aún con la cuarentena obligatoria por coronavirus, la investigación por el asesinato de Fernando Báez Sosa continúa. En los últimos avances en el caso, se detectaron nuevas pruebas que complican a dos de los rugbiers involucrados en el crimen de Villa Gesell.
Verónica Zamboni, fiscal del caso, recibió los resultados de unos estudios de ADN en las prendas de los imputados. Las mismas incriminan aún más a Matías Benicelli y Blas Cinalli.
Las pericias fueron realizadas en laboratorios del Ministerio Público en Junín. Los diagnósticos indican que encontraron sangre de Fernando en una camisa de Benicelli, la cual estaba mezclada con la propia. Por otro lado, detectaron sangre de Cinalli en la uña de un dedo meñique del fallecido.
Fue la propia Zamboni que solicitó estos estudios ante la Justicia. Por el momento, los ocho sospechosos están privados de su libertad en una alcaidía en la ciudad de La Plata.