Hasta la fecha hay 34.227 casos confirmados de coronavirus, de los cuales 1.201 resultaron fatales, según cifras del Ministerio de Salud de Bolivia.
Bolivia vive este jueves una jornada récord en el marco de la pandemia de coronavirus con 78 muertes y más de mil nuevos casos registrados en todo el territorio. Santa Cruz y Cochabamba son los departamentos más afectados.
En Santa Cruz se produjeron 22 de las 78 muertes por Covid-19 registradas en las últimas 24 horas, mientras que en Cochabamba ocurrieron 19 decesos y hace dos días los trabajadores del sistema de Salud denunciaron el colapso de los hospitales y los comerciantes del rubro fúnebre anunciaron que no daban abasto.
Incluso el ministro de la Presidencia, Yerko Núñez, dio positivo por Covid-19 en las últimas horas, por lo que sus contactos estrechos y otros funcionarios tuvieron que ser aislados y se les hará el test correspondiente, informó el diario paceño El Deber.
Como no hubo reunión de Gabinete esta semana se estima que la presidenta de facto, Jeanine Áñez, no estaría en peligro de haberse contagiado.
Hasta la fecha el Ministerio de Salud de Bolivia informó que se detectaron 34.227 casos de coronavirus, de los cuales 1.201 resultaron fatales y 9.764 devinieron en el alta médica de los pacientes.
Las otras 23.262 personas que dieron positivo por Covid-19 siguen en diversos estadíos de sus tratamientos, y en lugares como el departamento de Cochabamba el personal médico y de cocherías denunció públicamente el colapso de esos sistemas.
Por caso el director del Servicio Departamental de Salud de Cochabamba, Yercin Mamani, reveló que hay unos 60 muertos en distintos hospitales que aún no habían sido retirados para ser sepultados o cremados, informó el diario local Opinión.
A esa situación se le suman las bajas entre el personal por contagio de coronavirus y el déficit de equipamiento de bioseguridad.
Se calcula que en Cochabamba se concentra el 11% de los casos registrados en Bolivia y 187 de las muertes ocurridas hasta la fecha, por lo que el departamento volvió esta semana a la cuarentena rígida hasta el 10 de julio próximo.
El presiente de la Asociación de Funerarias de Cochabamba, Juan Carlos Orellana, dijo que la situación del sector es crítica pues no hay espacio para sepultar o incinerar a los muertos y en muchas ocasiones los propios empleados de las cocherías deben embalar los cadáveres en bolsas para trasladarlos, informó la agencia de noticias EFE.
“Nuestro pedido primordial es que las entidades correspondientes se encarguen de embalar los cuerpos, que se habilite otro horno crematorio y que haya un cementerio Covid-19 o más espacio para enterrarlos”, explicó Orellana en referencia a los dos hornos crematorios del departamento, uno en la ciudad homónima y otro en la localidad de Sacaba.
El Gobierno nacional, encabezado por Áñez hasta que se realicen las elecciones pendientes tras el golpe de Estado que derrocó a Evo Morales, implementó una “cuarentena dinámica” durante julio y las principales ciudades del país, como Santa Cruz, El Alto, La Paz y Cochabamba, mantienen ciertas prohibiciones para circular.