Así lo resolvió por unanimidad un tribunal de Segunda Instancia de Rafaela, que también rechazó los planteos formulados por la Defensa. La pena fue impuesta en un juicio oral realizado el año pasado en los tribunales de la ciudad de San Cristóbal. La fiscal que intervino en todas las etapas del proceso es Favia Burella.
Un tribunal de Segunda Instancia de Rafaela confirmó por unanimidad la sentencia a 10 años de prisión impuesta en primera instancia a Gabriel Esteban Martínez como autor de delitos contra la integridad sexual, cometidos en la ciudad de Ceres (departamento San Cristóbal). La resolución fue tomada por los camaristas Matías Drivet, Juan Manuel Oliva y Cristian Fiz.
La fiscal Favia Burella, a cargo de la Sección de Violencia de Género, Familiar y Sexual (GeFaS) de la Unidad Fiscal San Cristóbal, fue quien investigó el caso, representó al MPA en el debate de primera instancia e hizo lo propio ante la Cámara de Apelaciones.
En primera instancia, Martínez fue condenado a 10 años de prisión de cumplimiento efectivo como autor penalmente responsable del delito de abuso sexual de menor de trece años reiterado en número indeterminado, en concurso real con el delito de actos análogos al acceso carnal con persona menor de trece años agravado por la guarda. La pena fue impuesta por el juez Juan Gabriel Peralta en el marco de un juicio oral y público.
Los hechos
Burella sostuvo que Martínez “actuó con pleno conocimiento y voluntad de abusar sexualmente de una niña muy pequeña a través de actos de connotación abusiva. Además, lo hizo en forma reiterada en un número indeterminado de veces”. La funcionaria del MPA indicó que “el accionar delictivo fue realizado por el acusado aprovechando la circunstancia de guarda de la víctima y a sabiendas de que, mediante su realización, incitaba a la niña a la práctica prematura de actos sexuales”.
Por otra parte, la fiscal explicó que “los hechos ilícitos se llevaron a cabo en una vivienda de la ciudad de Ceres, lugar donde Martínez convivía con su esposa, quien es hermana de la abuela paterna de la niña”. En tal sentido, agregó que “estos actos fueron consumados durante la permanencia de la menor en esa casa, los martes y jueves previos al viernes 10 de agosto de 2018”.