Luego de una serie de estudios, los investigadores creen tener nuevas pistas sobre el Covid-19 y su alto nivel de contagiosidad.
Un grupo de investigadores parece haber descubierto a qué se debe la pérdida del olfato que presentan algunos pacientes con coronavirus.
Luego de estudiar el tejido extraído de la nariz de pacientes durante una cirugía, los especialistas encontraron niveles extremadamente altos de enzima convertidora de angiotensina II (ACE-2) solo en el área de la nariz responsable del olfato.
Al respecto, se cree que esta enzima es el “punto de entrada” que permite que el coronavirus entre en las células del cuerpo y cause una infección.
Los resultados de la investigación fueron publicados en el “European Respiratory Journal”, la revista científica oficial de la Sociedad Respiratoria Europea. Allí se ofrecen pistas sobre por qué el coronavirus es tan infeccioso. Incluso, aseguran que enfocarse en esta parte del cuerpo podría ofrecer tratamientos más efectivos contra la enfermedad.
El equipo utilizó muestras de tejido de la parte posterior de la nariz de 23 pacientes, extraídas durante procedimientos quirúrgicos endoscópicos para afecciones como tumores o rinosinusitis crónica, una enfermedad inflamatoria de la nariz y los senos nasales. También estudiaron biopsias de la tráquea de siete pacientes. Ninguno de los pacientes había sido diagnosticado con coronavirus.
Luego de los análisis, encontraron la mayor cantidad de ACE2 en las células de revestimiento del epitelio olfatorio, es decir, el área en la parte posterior de la nariz donde el cuerpo detecta los olores.
Los niveles de ECA2 en estas células eran entre 200 y 700 veces más altos que en otros tejidos de la nariz y la tráquea, y encontraron niveles igualmente altos en todas las muestras de epitelio olfatorio, independientemente de si el paciente había sido tratado por rinosinusitis crónica u otra enfermedad.
Además, no se detectó ACE2 en las neuronas olfativas, las células nerviosas que transmiten información sobre los olores al cerebro.
Al respecto, el doctor Chen destacó que “esta técnica permitió ver que los niveles de ACE2, la proteína del punto de entrada del COVID-19, eran más altos en la parte de la nariz que nos permite oler. Estos resultados sugieren que esta área de la nariz podría estar donde el coronavirus está ganando entrada al cuerpo”.
Y agregó: “El estudio sugiere que la parte de nuestra nariz responsable del olfato también podría ser el lugar donde el coronavirus se afianza en el cuerpo. Este hallazgo deberá confirmarse, pero ofrece posibles nuevas vías para tratar la infección”.