China calificó de “intimidación” la decisión del Gobierno de Estados Unidos de prohibir las descargas de las aplicaciones TikTok y WeChat a partir del domingo y amenazó con sanciones similares “para proteger los derechos y los intereses legítimos de las empresas” del país.
El Ministerio de Comercio del gigante asiático marcó a través de un comunicado su fuerte “oposición” a la decisión tomada por Washington, la cual “daña gravemente los derechos e intereses de las empresas implicadas”, que son de origen chino.
“China llama a Estados Unidos a renunciar a la intimidación y corregir sus errores”, indica el texto .
El comunicado señala que si la posición de la Casa Blanca se mantiene “China tomará todas las medidas necesarias para proteger los derechos y los intereses legítimos de las empresas chinas”.
El anuncio, efectuado en plena escalada entre las dos principales potencias del mundo, no apunta directamente a ninguna empresa extranjera pero hace alusión a una serie de acciones que implicarían sanciones, restricciones a las actividades y entrada de material y de personal a China.
La lista incluirá a las empresas cuyas actividades “atenten contra la soberanía nacional de China y contra sus intereses en materia de seguridad y de desarrollo” o que violen “las reglas económicas y comerciales internacionalmente aceptadas”, según el Ministerio de Comercio.
El Gobierno de Donald Trump anunció el viernes que las descargas de las aplicaciones chinas TikTok y WeChat estarán prohibidas en Estados Unidos a partir del domingo por considerar que constituyen “amenazas a la seguridad nacional”.
“El Partido Comunista de China demostró que tiene los medios y la intención de utilizar estas aplicaciones para amenazar la seguridad nacional, la política exterior y la economía de Estados Unidos”, informó el Departamento de Comercio de ese país.
Según la Casa Blanca, TikTok, que tiene cerca de 100 millones de usuarios en Estados Unidos y unos 1.000 millones en todo el mundo, capta automáticamente “grandes cantidades de información”, incluidos datos sobre Internet y otras actividades de la red, como de la localización y de la navegación e historiales de búsqueda.
La red social de microvideos rechaza de plano la acusación y la CEO de la firma en Estados Unidos, Vanessa Pappas, afirmó que la prohibición “es perjudicial para la industria”.
La empresa ByteDance, dueña de TikTok, presentó a fines del mes pasado una denuncia ante los tribunales federales de Estados Unidos para impugnar la decisión de la Administración de ese país de prohibir esa aplicación, al argumentar que “no hay evidencia que lo justifique” y que además pone en peligro miles de empleos.
Pero lo único que parece conformar a la Casa Blanca es que ByteDance venda sus actividades en suelo estadounidense a un grupo local, situación que se encuentra estancada.
El gigante tecnológico Microsoft, la cadena de supermercados Walmart y la firma especializada en software Oracle, hicieron saber que pretenden convertirse en compradores.
El trasfondo del asunto de TikTok y el servicio de mensajería WeChat es la batalla por el dominio tecnológico que se está librando entre Estados Unidos y China.