Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), una de las entidades de la Mesa de Enlace, señaló que el impuesto a la riqueza que impulsa el kirchnerismo en el Congreso tendrá como consecuencia “menos producción” en el campo.
Como informó LA NACION el viernes pasado, a partir de un análisis realizado por el experto en temas tributarios del agro Héctor Tristán, el impuesto tendrá un alto impacto en la actividad agropecuaria porque “grava todos los bienes afectados, a una alícuota del 2 al 3,5% del patrimonio, sin mínimo no imponible”.
Tristán había alertado sobre una duplicación de impuestos y que, al no incluir el proyecto las exenciones que contiene la Ley del Impuesto a los Bienes Personales, “los inmuebles rurales cuyos titulares sean personas humanas y sucesiones indivisas, cualquiera sea su destino o afectación, también se verán alcanzados”. El experto alertó que el impuesto “no prevé deducciones, ni computa deudas, lo cual crea una ficción sobre el verdadero patrimonio del contribuyente obligado a tributarlo”.
En este contexto, en un comunicado CRA señaló que “genera nuevamente más que incertidumbres y falta de señales claras para el sector”.
Alertan que el tributo a las grandes fortunas será un “superimpuesto” para el campo
“Es una clara ignorancia de cómo se genera valor desde principal proceso productivo de la República Argentina que son las cadenas agroindustriales, donde el primer eslabón de las mismas (aquel que enciende la llave del proceso productivo; ya que no se puede industrializar y comercializar lo que no se tiene) es el campo; y justamente por esta razón este mismo eslabón es el primero en mérito”, apuntó.
La entidad remarcó que el 77% del ingreso del productor va al Estado y con el 23% restante tiene que pagar todos los costos de producción, vivir y volver a sembrar.
“Nuestros representantes muy lejos de generar los mecanismos adecuados por parte del Estado, y una participación virtuosa del mismo, recurren a recetas de probada improductividad en base a las urgencias de las necesidades de financiamiento, no se toman en cuenta cómo es el mecanismo de generación agregado de valor del sector agropecuario, en Argentina lo urgente se vuelve constante, los problemas de fondo nunca se solucionan, solo se emparchan y se ensayan paliativos que en el mejor de los casos tienen una cuestionable eficacia”, precisó.
Para la entidad del sector, “menos producción, menos granos, menos frutas, menos verdura, menos leche y menos carne” serán los resultados que tendrá el impuesto de ser aprobado.