El gobernador Omar Perotti expresó su dolor por el asesinato de Sebastián Cejas, el joven que fue baleado en la puerta del Hospital Español.
Cejas esperaba que su padre saliera de una práctica médica y fue baleado, presuntamente, robarle su auto. El mandatario santafesino manifestó su acompañamiento a la familia y manifestó que “más allá de los esfuerzos siente que todavía falta mucho en materia de seguridad”.
“Golpea, duele. Sentimos que hay que seguir mejorando. Toda la investigación ya está en marcha con Fiscalía. Deseamos el esclarecimiento pero fundamentalmente sentimos que más allá de todos los esfuerzos todavía falta mucho”, expresó el gobernador y agregó que falta prevención.
“Falta anticipar, falta la acción de prevención, que en estas circunstancias claramente no ha funcionado. Más de 2.200 armas en lo que va del año se han secuestrado en todo el territorio provincial. Hay demasiadas armas todavía circulando y estamos poniendo el mayor esfuerzo para quitarlas porque son las que después nos generan estos hechos”, dijo Perotti en declaraciones a Canal 3 de Rosario.
El mandatario santafesino consideró que este hecho es diferente a los anteriores homicidios, que en la ciudad de Rosario ya son 150 desde principio de año. “Los anteriores vienen con una secuencia de ilación entre distintos grupos, del enfrentamiento de distintas bandas delictivas. Hasta aquí las características no tienen esa particularidad, con lo cual es un dato que no deja de llamarnos la atención y de preocuparnos”, agregó.
Perotti sostuvo que la Policía santafesina tiene un déficit de agentes en tareas de calle. Anticipó que sobre el fin de semana llegará nuevo equipamiento policial a Rosario, particularmente patrulleros.
“Tenemos una tarea larga porque nos falta gente, necesitaríamos tener más gente en la calle. Mil policías se han retirado y 400 han ingresado. Estamos en una convocatoria para incorporar 1.600 agentes nuevos, hay que revertir un proceso de años que fue disminuyendo nuestro personal en la calle”, remarcó el gobernador y abundó: “Estamos premiando y estimulando a aquellos policías que están en la calle, sacando gente de las oficinas, tratando de llevarlos al terreno porque es donde deben estar y donde la gente los necesita. Estamos convencidos que es el camino para tener una presencia más activa y con mejores resultados, particularmente en Rosario y en el Gran Rosario”.
El gobernador expresó que los resultados en materia de seguridad “no se dan de la noche a la mañana” pero que su gestión está cortando “los vínculos con el delito”, que en su administración “no hay red de protección para nadie”.
“¿Todavía nos falta? Sin dudas. ¿Queremos mejorar? Sin dudas. Vamos a tener en los próximos días las leyes en la Legislatura para discutir un nuevo esquema de seguridad para los próximos años en la provincia, una nueva Policía para los próximos años en Santa Fe. Y discutir con todos, porque esa política de seguridad de esa nueva Policía tendrá que acompañar en los próximos años a otros gobernadores, a otras instancias políticas, por lo cual la necesidad de un acuerdo es imperioso”, finalizó.