En el arranque de esta semana, las operaciones bancarias de compra y venta de dólares siguen paralizadas por las dificultades para actualizar los sistemas y cumplir con las nuevas restricciones. Con acusaciones cruzadas entre los bancos y la ANSES, crece el temor en el mercado de que la operatoria no se reanude hasta octubre.
Desde el miércoles 16 estas operaciones están frenadas en los bancos. Al igual que en los días anteriores, el homebanking funciona, pero cuando el usuario intenta acceder a la compra de dólares, salta una advertencia que indica que la operación no está habilitada.
Ante el cepo recargado, las entidades tienen que actualizar sus sistemas para incluir el recargo del 35% del impuesto a las Ganancias. Pero también tienen que cruzar datos con ANSES y AFIP para determinar si cada cliente está o no autorizado a usar el cupo de US$ 200.
Entre las nuevas restricciones que el Banco Central puso en marcha la semana pasada figura la inhabilitación para comprar dólares para las personas que reciben el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) o alguna otra prestación de ayuda de parte del Estado durante la cuarentena.
Ya el jueves pasado, los bancos salieron a advertir que necesitaban que ANSES les habilitará una forma de consulta directa. Y que sin eso, la operatoria seguiría frenada.
Desde ANSES indicaron que no hace falta instrumentar ningún cambio ya que los bancos son los que pagan los beneficios sociales y cuentan con la Clave Bancaria Uniforme (CBU) de cada cliente y que con eso es suficiente para establecer si la persona está habilitada o no para operar en dólares.
La falta de avances para resolver el tema hace que la suspensión de la operatoria se prolongue y en algunos bancos ya advierten que podría extenderse por varios días más. Incluso no descartan que recién esté habilitada la compra de dólares cuando arranque octubre y se renueve el cupo de US$ 200.
“Los clientes se enojan con nosotros y la culpa no es nuestra”, deslizaron desde uno de las principales entidades. “Los bancos se encuentran adecuando sus sistemas y, para volver a habilitar los mismos, necesitan validar las operaciones de compra-venta o transferencias de sus clientes previo control con una base de datos de ANSES que deja constancia que el cliente no posee determinados beneficios de la seguridad social”, indicaron.
Según detallaron “se necesita que el BCRA le solicite formalmente a ANSES que genere esa información y que se la envíe a los bancos del sistema. Dicha base, al momento es de consulta manual y no permite el control online y automático por parte de los bancos. Si los bancos no cuentan con esa base tienen riesgos operativos y regulatorios”.
Entre las personas que según las nuevas normativas ya no podrán usar el cupo de US$ 200 mensuales figuran quienes cobran planes sociales, quienes tienen préstamos hipotecarios o prendarios cuyas cuotas hayan sido congeladas y quienes hayan entrado a la refinanciación automática de los saldos impagos de las tarjetas de crédito.