Tras la aprobación de la norma por parte del Senado, la vicegobernadora consideró que “se trata de una construcción colectiva, en un tiempo y un escenario adversos”, y ponderó que “una vez más, el movimiento de mujeres es protagonista de un cambio de época que ha llegado para quedarse”.
La titular de la Cámara alta, Alejandra Rodenas, consultada luego del debate que convirtió en ley el proyecto de paridad de género, expresó: “Se trata de una norma muy ansiada, un hito en la consolidación de una democracia paritaria en Santa Fe”.
Para la vicegobernadora, “esta ley promueve un escenario donde la equidad y la justicia definirán un nuevo y virtuoso paradigma de representación y participación”, al tiempo que resaltó “la lucha del movimiento de mujeres, la constancia y pasión de compañeras de diferentes sectores políticos”.
Rodenas manifestó que “el recorrido de la ley de Paridad de Género demuestra que se pudieron alcanzar los necesarios consensos”, y al mismo tiempo ponderó las dificultades: “Construimos esta ley en un tiempo y un escenario atravesados por una pandemia global, con la economía en crisis y frente a la indiferencia o la reacción de sectores que se resisten a aceptar la igualdad como valor social”.
En lo que hace al contenido de la flamante norma, la presidenta del Senado subrayó que “esta ley es un piso importante. Desde hoy, existirá la paridad de género en la composición de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial; partidos políticos, entes públicos con participación estatal y asociaciones y consejos profesionales”.
Rodenas afirmó: “Desde el mismo inicio de nuestra gestión, nos hemos propuesto junto con el gobernador Omar Perotti incorporar a la agenda pública todas las cuestiones relativas al género que estaban pendientes. La creación de la Secretaría de Estado de Igualdad y Género dio cuenta de esta decisión, y así lo hicimos. Con paridad hoy dimos un paso más y así seguiremos cumpliendo con aquello que nos hace –a todas y todos– más iguales y más democráticos.”
Asimismo, reflexionó: “Para entender la dimensión que adquiere este paso que hemos dado, es imprescindible recordar que no hay democracia completa sin asumir el paradigma político de la igualdad entre hombres y mujeres. Ése es el desafío actual, y así fue asumido por legisladoras y legisladores”.
Por último, Rodenas destacó “la buena predisposición de los senadores”, y elogió que “hayan incorporado a su agenda la temática de género, porque eso permitió un diálogo y un debate muy productivo”.