El mensaje lo sostiene la Asamblea de Trabajadores por la Salud Colectiva, un grupo que nuclea al personal sanitario de efectores públicos y privados de Rosario.
Reclaman que se restringa el contacto social ante el fuerte avance de la pandemia de coronavirus en la ciudad.
“La región está promediando casi 1.500 contagios diarios hace varias semanas, en un contexto donde el Estado fue perdiendo iniciativa a la hora de regular la circulación. Según las proyecciones del Conicet, de no restringirse el contacto social, habría al menos 200 muertes más por el coronavirus de aquí a fin de mes, que podríamos evitar si se toman medidas a tiempo”, señalaron desde ese espacio.
“Hasta las propias autoridades de salud a nivel municipal y provincial han reconocido en estas horas la necesidad de tomar alguna medida de restricción. Por eso venimos pidiendo el Botón Rojo intermitente”, reclamaron desde la asamblea.