El municipio no quiere que se repitan las postales del descontrol que se vieron en la costanera norte de la ciudad durante el fin de semana pasado.
El intendente Pablo Javkin activó diferentes áreas para cerrar dispositivos que eviten, entre otras cosas, las aglomeraciones en las filas para cruzar a la isla sin distanciamiento que se produjeron los últimos sábado y domingo.
Sin dejar de pedir responsabilidad ciudadana, y trabajando también para diversificar la oferta lo más rápido posible y evitar esos cuellos de botella en la zona de la Rambla Catalunya, se implementarán controles más férreos y un trabajo coordinado con los paradores y los botes taxi para minimizar el contacto del público y reducir la posibilidad de riesgo sanitario.
Una de las principales medidas será limitar la cantidad de gente que podrá cruzarse de costa en esos servicios. Esto significó acordar un tope con los titulares de los bares de la isla y los vendedores de boletos, para saber cuántas personas pueden recibir.
Los tickets se expenderán desde las 9 y hasta las 15, cuando se producirá el último cruce, ya que el horario límite que establece el decreto provincial para la circulación de lanchas es las 19 hs.