La bajante sigue debiéndose a la falta de lluvias aguas arriba, por lo que el fenómeno continuará durante los próximos meses, hasta fines de febrero o inicios de marzo.
El río Paraná vuelve a sorprender estos días por su nivel de caudal, el más bajo de los últimos meses. Si bien aún falta para el mínimo medido este año, que fue de 14 centímetros, los pronósticos del Instituto Nacional del Agua (INA) señalan que próximamente podría recaer hasta los 20.
La bajante sigue debiéndose a la falta de lluvias aguas arriba, por lo que el fenómeno continuará durante los próximos meses, hasta fines de febrero o inicios de marzo. Asimismo, la escasez de precipitaciones de este año es particular, porque redujo las cuencas de los otros ríos que alimentan al Paraná: el Paraguay y el Iguazú.
Los pronósticos indican que va a continuar esta situación, mientras solamente podrán haber “pequeños repuntes, como han habido desde marzo, con pequeñas crecidas por eventos meteorológicos en la cuenca brasilera”, señalaron desde el INA.
En Santa Fe, desde el inicio de semana, el río está por debajo del metro. El lunes perforó esa medida y la altura fue de 97 centímetros; el martes volvió a descender y marcó 88 cm; lo mismo ocurrió el miércoles cuando midió 83 cm. El último registro en el puerto local indicó 75 cm.
De esta manera, el río se acerca a los valores que se vieron a mediados de año cuando llegó a la altura récord de 48 cm el 21 de mayo o cuando marcó 60 cm el 15 de agosto.
“La perspectiva de corto plazo sigue siendo desfavorable. No se esperan eventos que puedan aliviar sensiblemente la situación de escasez y bajante que predomina en la región”, sostuvieron desde INA.
En ese sentido, aseguraron que “las conversaciones formales con los países vecinos se han mantenido, concentrando la atención en el caudal en el río Paraná y especialmente en los niveles frente a las tomas de agua urbanas”.
“La evolución de los caudales provenientes de las altas cuencas dependerá fuertemente de las lluvias sobre las áreas de respuesta hidrológica más rápida. La tendencia climática con horizonte en el 31 de enero de 2021 sigue siendo desfavorable. No permite esperar una recuperación franca en los próximos tres meses”, culminaron.