El FMI estimó que la economía argentina se recuperará 4,9% en el 2021, tras una caída del 11,8% proyectada para este año, en un informe publicado hoy.
Además, advierte que en la Argentina “los precios de los bonos soberanos se recuperaron al concluir los procesos de renegociación de la deuda pero han disminuido recientemente reflejando, en parte, incertidumbre sobre las políticas domésticas”.
Las proyecciones, tituladas “La persistencia de la pandemia nubla la recuperación”, alertan sobre el impacto del coronavirus en las Américas.
El Fondo aclara que, en lo que respecta a Argentina, no se publican las variables fiscales ni de inflación correspondientes a 2021-25 y 2020-25, dado que “en gran medida están vinculadas a las negociaciones aún en curso sobre el programa” de ayuda financiera.
El informe destaca que la Argentina, después de presentar ofertas para reestructurar su deuda en abril y julio, llegó a un “acuerdo con sus acreedores externos clave en agosto”.
Indica que “la compleja reestructuración de u$ s 65.000 millones en bonos de legislación extranjera, que incluyeron 35 títulos diferentes bajo dos contratos de emisión distintos (con cláusulas de acción colectiva antiguas y mejoradas) y en múltiples monedas, se concretó el 4 de septiembre con un 99 por ciento de participación de los acreedores después de aplicarse las cláusulas (94,6% aceptaron el canje)”.
Señala que, en forma paralela, u$ s 15.200 millones de bonos en moneda extranjera emitidos bajo legislación local fueron reestructurados para el 21 de septiembre, con una participación de 99,4% de los bonistas y bajo términos y condiciones similares.
Y aclara que “la reestructuración de la deuda se llevó a cabo al margen del programa respaldado por el FMI”.
El reporte destaca que las reestructuraciones de deuda “proporciona un significativo alivio de liquidez durante la próxima década de u$ s 33.300 millones para Argentina”.
Y estima que reducirán la relación deuda pública/PIB al 40% en el país.
La devaluación en el horizonte
“No es descabellado pensar en una devaluación del tipo de cambio oficial en los próximos meses”, sostuvo la consultora Ecolatina, en un informe en el que advirtió sobre la caída de reservas.
Explicó que las reservas de libre disponibilidad están “en mínimos desde 2016” y alertó que, “si no aparece una fuente adicional de dólares para ´quemar´ en el mercado o la demanda de divisas no se relaja rápidamente -dos cosas que parecen poco probables-, un salto del tipo de cambio será inevitable”.
El informe advirtió en que “un salto del dólar oficial aceleraría la inflación y profundizaría todos los problemas que arrastra nuestra alicaída economía, a la par que demoraría la incipiente recuperación de la actividad luego del deterioro histórico que provocó la pandemia y la cuarentena”.
En el reporte, titulado “No hay razones para devaluar. Tampoco reservas”, estima que el Banco Central sacrificó más de u$ s 1.600 millones de reservas para contener a la divisa en septiembre -de los cuales u$ s 600 millones fueron en la segunda mitad, luego del endurecimiento de cepo- y más de u$ s 900 millones en octubre.