Por ahora se aplica de manera reducida.
Para testear a las personas consideradas de alto riesgo de contagio de coronavirus, China comenzó a instrumentar a mayor escala los hisopados anales por considerarlos más eficaz en la detección.
Actualmente en el país sobreviven varios focos pequeños del virus en la zona norte, impulsando a planificar tests masivos. En ese sentido, el método puede, según expresó el médico Li Tongzeng a la cadena CCTV, “aumentar la tasa de confiabilidad de relevamiento de las personas infectadas” ya que las huellas del virus persisten más a lo largo del ano que en el tracto respiratorio.
Y si bien se adelantó que este testeo no se implementará de manera masiva, en una encuesta de la red social china Weibo, el 80% de los encuestados dijeron que “no podían aceptar” el método invasivo.
Incluso Tongzeng advirtió que “la recolección de hisopados anales no es tan conveniente como la de garganta” por lo cual “por el momento solo los grupos clave, como los que están en cuarentena, reciben ambos”.