Las ART no reconocieron de igual manera las enfermedades profesionales del COVID – 19 en CABA y Buenos Aires que en el resto del país. De esta manera se ahorraron más de 200 millones sólo por los casos no reconocidos de COVID-19 en las provincias de Santa Fe y Córdoba.
Las ART no cubren de igual manera los casos laborales de COVID-19. En CABA y Provincia de Buenos Aires los casos laborales representaron más del 15% del total de casos de Covid-19 de la población, mientras que en Santa Fe y Córdoba ese porcentaje fue del 3%, y dejando a los trabajadores de estas provincias en situación de vulnerabilidad. Esta conclusión se desprende de un análisis de los últimos informes que publicó la SRT.
Como se diría en la jerga del seguro: “las compañías aseguradoras nunca pierden, lo que se gasta de más por un lado se recupera por el otro”. Es por esta razón que la excelente cobertura brindada por las ART a los trabajadores y empleadores de CABA y Buenos Aires, fue financiado por la pésima cobertura brindada al resto de las provincias, principalmente en Santa Fe y Córdoba.
La razón por las que las ART han podido llevar adelante esta maniobra de discriminación se basa en el artículo 5to del DNU 367/20 que declara al COVID-19 como Enfermedad Profesional (EP). Dicho artículo establece que será reconocido el COVID-19 como EP hasta SESENTA (60) días después de finalizado el plazo de aislamiento social, preventivo y obligatorio (ASPO).
Lo que sucedió por ejemplo en Santa Fe, fue que la fase de ASPO se terminó el 8 de Junio, por lo tanto, según lo que expresa el decreto 367/20, 60 días después, es decir el 7 de Agosto, dejó de regir para los trabajadores santafesinos la cobertura del COVID 19 como EP.
Es importante destacar que hasta el 7 de Agosto, en la provincia de Santa Fe se habían registrado 2.047 casos. A partir de esa fecha y hasta el 12 de Septiembre, día en que algunos departamentos volvieron a la fase de Aislamiento por decreto provincial, se produjo un aumento exponencial de casos, registrando 15.515 casos en dicho período. Es decir, que justo en el momento en que el coronavirus empezó a afectar con mayor fuerza y se incrementaron exponencialmente los contagios las ART dejaron de tener la obligación legal de cubrir los casos en el territorio santafesino. Similar proceso ocurrió en la provincia de Córdoba.
Como se menciona previamente, luego del 12 de Septiembre, por la suba de casos, algunos departamentos de la provincia regresaron a fase de aislamiento, como el caso de los departamentos del sur como Rosario y San Lorenzo, al que más tarde se sumó el departamento La Capital. Pero la inercia administrativa en el rechazo de los casos por parte de las ART continuó de forma que nunca pudo lograrse fehacientemente que el COVID – 19 fuera reconocido como enfermedad profesional presuntiva, tal como lo establecía el decreto 367/20.
Dicho decreto, debería haber sido ejecutado como un soporte a los trabajadores que arriesgaron su vida al asistir al trabajo en situación de pandemia, terminó funcionando de forma inversa, cubriendo cuando menos lo necesitaban y quitando la cobertura en la etapa de mayor contagio y circulación del virus.
Más allá de los tecnicismos del decreto, y al cual las ART apelaron para rechazar las denuncias de enfermedad de COVID-19 como laboral, el espíritu del decreto fue vulnerado, y por eso los trabajadores de la provincia fueron discriminado por las ART, que dentro del sistema de riesgos del trabajo, es el actor encargado de reparar el daño.
Estas maniobras de las ART les permitieron un ahorro estimado en más de 200 millones de pesos en el 2020 sólo en las provincias de Córdoba y Santa Fe, y sólo en materia de cobertura del Covid 19. A este ahorro, hay que agregarle una tendencia que hasta el tercer trimestre del 2020 marcaba un año con un 22,5% menos de accidentes en Santa Fe y un 28,4% en Córdoba respecto al 2019 producto del parate productivo.
Los números que respaldan la discriminación
Al 4 de Diciembre, a nivel nacional, se habían reportado 1.448.092 casos de COVID 19 en la población. De ese total, 199.643 fueron reconocidos por las ART como laborales, es decir el 14%.
En la tabla se observa la proporción entre el total de casos de COVID-19 de la población y los casos de COVID-19 reconocidos por las ART. De esta tabla se desprende, que de cada 100 casos de COVID – 19 que se registran en el país, 14 son de origen laboral reconocidos por las ART.
Si se compara Provincia por Provincia, se puede observar que en Provincia de Buenos Aires mantiene una proporción similar a la media nacional, que CABA duplica y más, pero que Santa Fe y Córdoba (terceras y cuartas en cantidad de casos respectivamente) tienen una relación de casi 5 veces menos que la media nacional.
Se debe tener en cuenta, que de seguir la media nacional, en Santa Fe debería haberse reconocido en total 21.000 casos laborales y en Córdoba, 16.000.
El promedio de gastos de las ART en atención de los casos de COVID-19 es de casi $ 8.000. Es decir que sólo por los casos que no se le reconocieron a Santa Fe y Córdoba, las ART se ahorraron más de $ 220 millones. Y esto sin tener en cuenta que Santa Fe y Córdoba tienen un 22,5% y un 28,4% menos de accidentes respectivamente.
En definitiva, fueron las provincias del interior del país, y principalmente Santa Fe y Córdoba quienes financiaron el reconocimiento del COVID-19 laboral a CABA y Buenos Aires.
El comportamiento de las ART
Las ART son organizaciones con fines de lucro. Por lo tanto, el comportamiento va a estar en función de maximizar sus ganancias. En temas sensibles, como la cobertura del COVID-19 en situación de pandemia, se debe hacer un balance entre las ganancias de la empresa, la competencia en el mercado, la imagen corporativa y las posibilidades que habilitaN lo normativo.
Analizando estas 4 variables se pueden hacer las siguientes observaciones:
- Competencia del mercado: Santa Fe y Córdoba poseen el mercado de ART más concentrado del país, lo que permite definiciones unilaterales de las ART en un mercado cautivo.
- Imagen corporativa: Un caso rechazado en Santa Fe y Córdoba rechazado tiene menos repercusión mediática que en CABA y Buenos Aires.
- Ganancias de la empresa: Teniendo en cuenta la mayor competencia de mercado y la mayor repercusión mediática, las ART cubrieron en mayor medida los casos de COVID-19 en CABA y Buenos Aires. Para compensar este excedente de gastos, se optó por una menor cobertura en el resto de las provincias.
- Normativa: El decreto 367/20 habilitó el rechazo en las provincias del interior que pasaron a la fase de Distanciamiento. Pero una vez que volvieron a la fase de aislamiento, la inercia de rechazos por parte de las ART continuó.
Estos 4 factores explican el comportamiento discriminatorio de las ART respecto a las provincias del interior. Para entender mejor, basta con mencionar el siguiente dato: Mientras que al 4 de diciembre (fecha de cierre del informe de la SRT) la distribución de casos de COVID-19 en el país se conformaba en un 54% concentrado entre CABA y Buenos Aires, y un 46% en el resto del país, la cobertura de los 200 mil casos reconocidos por las ART se distribuye en un 81% para CABA y Buenos Aires y un 19% para el resto del país.
La situación planteada es una muestra del comportamiento de las ART. Para evitar abusos como los planteados, es necesario una mayor presencia del estado, tanto nacional como provincial, que regule el comportamiento de las ART. Los trabajadores del interior, y más precisamente los santafesinos, merecemos los mismos derechos que los de CABA y Buenos Aires.
Escuchá el informe completo del Ingeniero Industrial, docente universitario, especialista en Higiene y Seguridad Laboral Juan Manuel Ramb, miembro de Seguramente, el programa de seguros de Radio EME: