El presidente de FAIM, Diego Cifarelli, aseguró que con el precio controlado de la harina “pudimos tener solo dos aumentos, uno del 5% y otro del 4%”.
El presidente de la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM), Diego Cifarelli, aseguró que no hay desabastecimiento de harina de trigo a nivel nacional en las panaderías. Sin embargo confirmó que desde las fiestas no pueden reponer la mercadería y deben sacar del “stock de seguridad” que poseen para este tipo de situaciones.
Sólo para poner un ejemplo el precio pizarra del trigo en Rosario cotizaba 16.670 $/tn el 24 de diciembre (antes de las fiestas), mientras que en el día de hoy el valor es de 20.270 $/tn, marcando un aumento del 21,5% en menos de un mes y con la cosecha del cereal recién finalizada (PAS jueves 14 de enero).
Cifarelli explicó que el principal problema que enfrenta la industria molinera es que los productores no “están atraídos” a vender debido a la falta de incentivos que les ofrecen desde el Gobierno, y afirmó que “no deberían crear herramientas coercitivas como por ejemplo un aumento de retenciones o el cierre de exportaciones, sino más bien generar estímulos para que el productor quiera desprenderse de las mercaderías”.
Precios
Otro de los factores que afecta directamente a la industria molinera, señalado por el directivo, es el precio controlado de la harina que rige desde el 6 de marzo de 2020. “Desde esa fecha pudimos tener solo dos aumentos, uno del 5% y otro del 4%”.
Según el informe interanual del INDEC la harina es lo que “menos subió, mientras que el trigo subió 61%, el cual representa el 80% del costo de la harina. Tener el precio fijo con un 9% acumulado de un año contra un 61% de aumento de materia prima básica, más la inflación normal del orden del 35/40% es insostenible”, afirmó el titular de FAIM.
Cifarelli remarcó además que cuando se congelaron los precios, la bolsa de 25kg de panadería costaba cerca de 620 pesos mientras que hoy en día cuesta alrededor de 700 pesos. “Lo que necesitamos es un valor similar a 850/900 pesos más impuestos”.
Y finalizó: “Si el trigo es precio mundial, si la harina es la más barata del mundo y el pan es a precio mundial, evidentemente la complejidad es enorme”, concluyó el representante de FAIM.