El periodista se recupera de la leucemia que sufre hace un año y este sábado regresó, a través de una videollamada, a su programa “El run run del espectáculo”.
En octubre pasado, Lío Pecoraro anunció que estaba librando una batalla contra la leucemia, la cual deterioró su salud. Desde ese momento, tanto sus seres queridos, como sus colegas y también sus seguidores, comenzaron a rezar por él y a enviarle buenas energías.
Tras varios meses de lucha y siguiendo los tratamientos correspondientes, Pecoraro comenzó a experimentar mejoras y hace dos semanas que ya se encuentra en su hogar. La última noticia es que este sábado pudo volver a la co-conducción de su programa El run run del espectáculo (Crónica), junto a Fernando Piaggio.
Lo hizo desde su hogar y conectado al piso a través de una videollamada. A Lío se lo notaba muy emocionado, feliz y con mucha energía: “Acá estamos regresando en vivo por la pantalla de Crónica con este marzo que se lanza con todo, con una programación espectacular que tiene el canal. Poniendo la mejor estos 27 años de trayectoria al aire, firme junto al pueblo”, fueron sus primeras palabras al aire.
“Para mí es un placer volver a reencontrarme en este año con vos, mi compañero del alma y todo el equipo. Esta es la tercera temporada. ¿Cómo andan, chicos?”, quiso saber el enérgico Lío. “Qué lindo verte en pantalla, se te ve radiante. ¡Bienvenido! ¿Cómo estás vos?”, le devolvió Piaggio.
En ese punto, Pecoraro hizo un resumen de su salud en las últimas semanas: “Estoy muy contento y estoy muy bien de salud. Todo el mundo sabe el proceso por el cual atravesé con una enfermedad no fácil de transitar, pero junto al amor de la gente, con el cariño, los profesionales del Hospital de Clínicas y con vos (en referencia a Piaggio) fundamentalmente, que me seguís acompañando día a día en esta travesía que ya está ganada desde el día uno”, expresó. “A ver cuándo te vemos con el saquito, la camisa y acá, eh”, bromeó Piaggio.
“Decretado, sanado, ganado” son las tres palabras que conforman el lema optimista al que Lío se aferra para seguir adelante en este trance. Y lógicamente lo volvió a mencionar: “Creo que el milagro y el ‘decretado, ganado y sanado’ han sido tan fuertes que dieron sus frutos. Estoy en casa ya hace dos semanas, y estoy muy contento y yendo al hospital para hacerme los controles pertinentes, como corresponde. Me falta una etapa más para ponerle un sello de consolidación, pero estoy muy bien, entero y fuerte”, explicó.
“La mía es una historia porque te cambia todo de un día para el otro, te viene a dar un ‘sacudón’, una enseñanza de vida que es muy dura y fuerte a la vez”, dijo Pecoraro, quien se quebró. Y con lágrimas en los ojos, agregó: “Tenés que ser muy fuerte para poder salir adelante y lograrlo requiere de una entereza muy fuerte. De poner los pies sobre la tierra y decir ‘yo voy a poder’. Los decretos en la vida son importantes y el mío lo fue”.
Pecoraro también dedicó un espacio de gratitud por el apoyo, la atención y la entrega recibida a todos los profesionales de la salud del Hospital de Clínicas: “Le quiero agradecer al director, Marcelo Melo, a Fernando que está en prensa, a la doctora Isabel Fernández, que es mi médica clínica y amiga, a la doctora Francisca Rojas, a Mariela Gómez, a Enriqueta… a todos los enfermeros, a la gente de limpieza. Por ahí suena reiterativo cada vez que yo aparezco y digo esto, pero es tan real porque es un hospital público y ahí es donde yo encontré mi tratamiento, donde estuve muy bien atendido. Y donde encontré también parte de mi casa. Pasé mucho tiempo ahí: mañana, tarde y noche viviendo en ese hospital y salí adelante”, dijo con más lágrimas en los ojos.
“Ahora viene una etapa que va a ser de la consolidación final del tratamiento”, expresó Lío acerca de cómo seguirá esta historia.
Además de hablar de su experiencia, el periodista dejó un importante mensaje a la audiencia a la hora de cuidar la salud: “No tienen que tener miedo de ir al médico, no se dejen estar y donen sangre porque donar es salvar vidas. Hay que tenerlo en cuenta porque mucha gente dejó de ir a los médicos por la pandemia. Yo les pido que no dejen de ir al médico, no se automediquen. Ante la menor cosa que pase en su organismo, vayan al médico y consulten. Yo lo hice a tiempo, les pido que hagan lo mismo”, cerró.
Las repercusiones por la vuelta de Lío no se hicieron esperar. Pero la más especial fue un mensaje que el periodista recibió por parte de su padre, y que luego compartió en su Instagram.
“Hola Lío, yo, tu papá Carlos Pecoraro, reviento de alegría, felicidad y orgullo que seas mi hijo y ver que volvés a la TV con las ganas que le ponés, con tu autoestima tan alta para vencer las piedras que la vida te pone en el camino. Excelente lo tuyo junto a Fernando, ¡qué profesionalismo! Vamos con El run run… todavía!”, escribió. Y la respuesta de su hijo fue: “Me hiciste emocionar, papá. ¡No me para nadie!”.