Los vecinos de barrio Cabal denunciaron reiterados hechos de inseguridad y vandalismo en la zona.
La inseguridad y el vandalismo atormentan el norte de la ciudad de Santa Fe. Los vecinos de barrio Cabal denunciaron la falta de servicios de telefonía y celular a causa de los reiterados robos de cables en la zona.
Desde el ingreso al vecindario del norte de la capital provincial, en Avenida Blas Parera al 6.700, vecinos autoconvocados dialogaron con el móvil de Radio EME sobre sus reclamos diarios. “Pedimos la reposición del cable de teléfono. Desde la empresa nos dicen que nos van a reponer desde hace tiempo y no lo hacen. Algunos seguimos pagando, y otros quisieron darse de baja y no se la dieron. Hay muchos comercios, gente grande que necesitan del teléfono. Hay que encontrar una solución porque después lo vuelven a robar”, relató una vecina.
En tanto, otra vecina le mencionó a Gabriela Hassan que no perciben del servicio de telefonía e internet desde hace cuatro meses: “Hay gente que no tiene servicio y le siguen mandando las boletas. Hoy como estoy no puedo reclamar. Nos dicen que llamemos por teléfono y no podemos porque no tenemos. Para el 12 nos prometieron que iban a restaurar el servicio. Tengo la boleta y no la voy a pagar”.
Además, los residentes de barrio Cabal detallaron como se producen los cortes de cables. “Parecen expertos en cortar cables. Los vecinos estamos acostumbrados. A plena luz del día cortan los cables y se los llevan”, apuntó una vecina.
Inseguridad diaria
Asimismo, las personas oriundas de la zona expresaron su miedo y preocupación por las situaciones de inseguridad que registran cada día. El pasado jueves, se viralizaron imágenes sobre el asalto a una mujer en bicicleta sobre calle Vieytes, donde un motochorro la empujó del birrodado y le sustrajo sus pertenencias.
“Reclamamos por la inseguridad en el barrio. Hemos tenido un caso el jueves pasado sobre calle Vieytes en pleno mediodía donde ingresa una joven y se le aproxima una moto, la tironea, y pierde el conocimiento. Luego le robaron el celular”, relató una vecina denunciante. La joven sufrió perdida de conocimiento y fractura de clavícula.
Por último, los comerciantes de la zona manifestaron las dificultades que tienen para desarrollar sus actividades. “Los clientes no nos pueden llamar. Además, no podemos acordar la entrega y recepción de mercadería. Desde la compañía nos patean las fechas. Y nos afectan la clientela”, detallaron los dueños de los locales cercanos.
Escuchá el informe de Gabriela Hassan: