El mandatario brasileño ironizó en Twitter sobre las medidas anunciadas el miércoles por la noche para frenar la segunda ola de coronavirus.
Jair Bolsonaro protagonizó un nuevo cruce con Alberto Fernández . El presidente de Brasil se burló en las redes de las nuevas restricciones anunciadas el miércoles por la noche por el presidente argentino y éste salió a contestarle que “habría que explicarle un poco cómo funciona la Constitución″.
“El Ejército argentino en las calles para mantener al pueblo en casa. Toque de queda entre las 20 y las 08. Buen día a todos”, escribió el presidente de ultraderecha, que siempre se opuso a las cuarentenas y otras medidas restrictivas por la pandemia en su país, aún cuando atraviesa el mayor colapso hospitalario de la historia.
En una entrevista con Radio 10 en la que defendió las restricciones anunciadas por 15 días en el AMBA, Alberto Fernández sostuvo que “habría que explicarle un poco a Jair Bolsonaro cómo funciona la Constitución: en Argentina no hay toque de queda; en Argentina las Fuerzas Armadas no hacen seguridad interior”.
“Yo tengo una gran valoración de nuestro Ejército, nuestra Armada y nuestra Fuerza Aérea, que han colaborado de un modo magnífico en la pandemia; ahora les he pedido que me ayuden a montar postas sanitarias para que podamos aumentar los testeos y atender alguna situación que sea necesario atender. El Ejército tiene médicos y enfermeros muy capacitados y eso es lo que les he pedido” indicó el mandatario sobre el papel de las fuerzas armadas, que al principio de la pandemia también salieron a repartir alimentos en el conurbano.
“Yo no he declarado el estado de sitio ni lo pienso hacer”, afirmó. “Las Fuerzas Armadas no están para hacer seguridad interior, sino para dar apoyo a la gente en situaciones de catástrofe”. “Es impactante que Bolsonaro diga una cosa así”, concluyó.
Un historial de cruces y declaraciones polémicas entre socios
Las comparaciones -y descalificaciones- con nuestro país son frecuentes en la retórica de Bolsonaro y su gobierno. Tan solo la semana pasada, el vicepresidente Hamilton Mourao calificó a la Argentina de “eterno mendigo” en una charla sobre responsabilidad fiscal.
No podemos escapar de las reglas de responsabilidad fiscal. Si lo hacemos, el país quiebra y, si el país quiebra, vamos a estar igual que nuestro vecino del sur, igual que la Argentina, eterno mendigo”, expresó.
En el mismo tono, el ministro de Economía, Paulo Guedes, dijo hace un mes que si Brasil toma malas decisiones en política económica demoraría “seis meses para convertirse en la Argentina y un año y medio para convertirse en Venezuela”.
Las tensiones entre el gobierno de Bolsonaro y el de Fernández empezaron desde el momento en que Bolsonaro apoyó con firmeza la reelección de Mauricio Macri durante la campaña electoral de 2019 en la Argentina. “Nos preparamos para lo peor”, manifestó luego Bolsonaro antes de que asumiera Fernández.
El presidente argentino le contestó con igual dureza: “Celebro que hable mal de mí: es racista, misógino y violento”.
La pandemia fue otro punto que remarcó las diferencias entre ambos gobiernos, ya que tuvieron respuestas diametralmente opuestas. Bolsonaro minimizó desde el inicio la gravedad del Covid-19, al que calificó de “gripecita” e incluso apeló en la Justicia las medidas de distanciamiento social adoptadas por gobernadores y alcaldes, mientras que Fernández optó en el principio de la crisis por una cuarenta rígida.
Pese a las tensiones, la Argentina sigue siendo el tercer socio comercial de Brasil a nivel mundial y el primero en la región, por lo que a principios de marzo, Bolsonaro respaldó las negociaciones de la Argentina con el Fondo Monetario Internacional.