En agosto de 2019, Gladys, “La Bomba Tucumana” se sentó en el piso de “Intrusos” para contar lo mal que la pasaba por las agresiones que sufría en las redes sociales cuando participó en “Bailando por un sueño”. “Me decían: ‘Empanada de esto’, ‘negra villera’, ‘sucia’, ‘pata sucia’, ‘ladrona’, ‘el único tema que tenés (por La pollera amarilla)’, ‘gorda’, ‘cerda’, ‘sos la mamá de Morena Rial’…”, anumeró la cantante tropical, sin percatarse que había hecho referencia a la hija mayor de Jorge Rial, el conductor del programa. Un año más tarde, la joven de 22 años decidió denunciar a la artista por discriminación y en las últimas horas, la causa fue elevada a juicio oral por la fiscalía Nº22 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En consecuencia, cambia la pena que puede recaer sobre Gladys es más dura y puede consistir en hacer trabajo de utilidad pública, asistir a un taller para la composición del conflicto y afrontar los costos del juicio. “A juicio oral ‘La Bomba Tucumana’ por discriminación. Morena no va a tolerar agresiones de nadie”, anunció el abogado Alejandro Cipolla, quien representa a Rial. Mientras que la joven se limitó a compartir la publicación del letrado.
Hasta el momento, “La Bomba” decidió no hacer declaraciones públicas. Pero meses atrás, cuando empezó el conflicto mediático aseguró que sus dichos fueron “sacados de contexto”. “¿Cómo puede imaginar, una mente perversa y malvada, que yo me voy a sentar en un programa a agredirla o hacerla sentir mal? Estaba enumerando la maldad que tiene la gente para hacer sentir mal a las personas. Fue en ese contexto”, manifestó en una entrevista radial y señaló que Jorge Rial en ningún momento se había sentido incómodo.
Y se ofreció a disculparse públicamente: “Si necesita plata, que no me pida porque no tengo, pero si necesita una disculpa, porque ella entendió mal, ningún problema en dársela, porque sé que ella sufrió muchísimo bullying, como yo. Yo estoy del lado de ella. ¿Cómo voy a agredirla con algo que sé que también sufría? Es de locos pensar que la discriminé”. Sin embargo, estas declaraciones no lograron satisfacer a Morena, quien se mantuvo firme en su determinación de manejar el tema en la Justicia.
Por otra parte, en los últimos meses la joven tuvo un perfil mediático muy bajo y se mudó a Córdoba junto a su hijo Francesco, fruto de su relación con el futbolista Facundo Ambrosioni, pero ya piensa en regresar a Buenos Aires. “No es lo mismo venir de vacaciones que estar viviendo. Estoy medio aburrida ya”, manifestó.