Los presos se fugaron con las visitas dentro de carritos o valijas que ingresaron con pertenencias y no fueron controlados a la salida. El subsecretario de Asuntos Penitenciarios dijo estar “avergonzado”.
La división Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal y un grupo táctico de la Policía detuvieron a la pareja de Carlos D’Angelo, uno de los fugados, junto a Hugo Peralta. Tras el allanamiento, se comprobó que los reclusos se escaparon en un carrito en el que se llevan las pertenencias durante las visitas familiares.
El lunes a las cinco de la tarde las visitas se fueron junto con los presos y nadie se dio cuenta hasta la noche, cuando se hizo el recuento habitual. Allí notaron que faltaban dos reclusos.
D’Angelo y Peralta habían sido protagonistas de aquella histórica fuga de una docena de presos en la autopista Rosario – Santa Fe, luego fueron recapturados.
El subsecretario de Asuntos Penitenciarios, Jorge Bortolozzi, se expresó al respecto: “Uno no puede menos que estar consternado y avergonzado por el bajo nivel de conocimiento y de contracción al trabajo de los empleados penitenciarios”.
“Violaron cuatro controles antes del llegar al playón de Piñero y nadie lo requisó. Cuando yo entro me abren el baúl y me revisan. A estas dos personas con dos valijas enormes, con un carrito y con dos personas adentro, nadie las revisó”, agregó Bortolozzi.
Bortolozzi explicó que “es imposible fugarse salvo que se haga la vista gorda, haya connivencia y mala praxis. Tienen una pésima formación (los empleados penitenciarios) y la corrupción ha formado a este coctel”.
Los fiscales que investigan la fuga mantienen demorados a agentes del Servicio Penitenciario. Algunos bajo sospecha de haber facilitado la fuga; otros por no avisar a la Justicia para acelerar la investigación. Se define quiénes quedan detenidos para audiencia imputativa.
En las cámaras de vigilancia se ve salir a la pareja de D’Angelo con un carro y una caja y a otra mujer de la misma manera, no fueron parados en ninguno por los controles. Se ve cuando salen del penal y en el estacionamiento a D’Angelo subiendo a un auto negro.
Finalmente, Bortolozzi expresó con preocupación: “En la fuga de la autopista no hubo ningún sancionado, a ningún empleado se lo cesanteó. Es una situación dramática”.