Los restos del ex gobernador Miguel Lifschitz no serán velados. Su familia y sus seres queridos dispusieron que se reciban muestras de afecto en la Biblioteca Argentina Dr. Juan Álvarez, ubicada en pasaje Álvarez 1550, en el centro de Rosario.
Pasadas las 22 del domingo comenzaron a llegar a la Biblioteca Argentina allegados y seres queridos que se consolaban mutuamente.
“Simplemente, mucha gente se pregunta de qué manera hacer llegar un reconocimiento. Estamos atravesando una pandemia y no lo podemos despedir como se debe. Es para dejar una muestra de afecto a Miguel en un lugar tan emblemático”, comentó el diputado provincial Joaquín Blanco.
Al lugar también llegaron Raúl Lamberto, Gustavo Zignago, Mónica Fein, Enrique Estévez, Maximiliano Pullaro, Juan Cruz Cándido, Maria Eugenia Schmuck, Franco Bartolacci, Horacio Ghirardi, Alicia Ciciliani, entre otros. Cerca de las 23.30 llegó su esposa, la diputada Clara García, visiblemente conmovida, quien se fundió en abrazos de sus allegados.
La Biblioteca Argentina es, sin dudas, un lugar central en la fisonomía rosarina. Pero también para el paso de Miguel Lifschitz como gobernador ya que fue quien, junto a la por entonces intendenta de Rosario Mónica Fein, inauguró la remodelación del espacio cultural.
En ese lugar tan querido por Lifschitz todos buscaron contener a la familia y contenerse entre ellos mismos en este momento de dolor y desconsuelo por la pérdida de un líder político del que estaban orgullosos.