Un empleado de la sección Informática del ministerio de Gestión Público se hizo presente en sede policial para denunciar un hecho ilícito.
Según su relato indicó que momentos antes personas desconocidas sustrajeron desde las oficinas 219 y 220 de la citada sección tres teléfonos celulares de distintas marcas y una Notebook.
Agregó que las llaves de dicha oficina las tenía solamente el, aunque más adelante hizo un particular descargo al sostener que días atrás entregó dichas llaves al personal de limpieza para que encere el piso.
Ya en la investigación del hecho se supo que poco después uno de los celulares fue activado en la ciudad de Gálvez.
Por último se indicó que en las oficinas donde se consumó el robo no hay cámaras de seguridad, y que las puertas de acceso no presentaban signos de violencia.