El presidente de la Nación, Alberto Fernández, anunció, desde la Residencia de Olivos, la promulgación de la Ley 27.621, que implementa la Educación Ambiental Integral (EAI) en todo el país.
Luego de las intervenciones de los allí presentes, entre ellos, Macarena Sánchez, los ministros de Ambiente y Educación, Juan Cabandié y Nicolás Trotta, respectivamente, Fernández aseguró “sentirse de otro siglo”.
“Un tiempo donde el medio ambiente se descuidó y mucho y el ambiente fue dejado en un segundo plano: lo que se llamó “desarrollo” fue, cada día más, desatendiendo el ambiente en el que vivimos, la tierra que cultivamos, el aire que respiramos, el agua que disfrutamos… todo fue pasando a un segundo plano en procura de un desarrollo, entre comillas, que hacía cada vez menos vivible el planeta”, aseguró.
Y siguió: “Pareciera ser que el problema ambiental es una demanda del futuro. Pareciera ser que queremos alcanzar un futuro mejor y nos fijamos objetivos de acá a diez años, pero, en verdad, el problema ambiental es un problema del presente y, por lo tanto, aunque vengo de otro siglo, me doy cuenta de que hay que construirlo ya ese presente. Y eso supone un cambio de cultura, un cambio de paradigma”.
“El desarrollo exige un crecimiento igualitario pero, fundamentalmente, un crecimiento que no contamine: que no haga menos vivible el país en el que estamos, el barrio, el campo, el lugar. El desarrollo exige que podamos alcanzar el objetivo de vivir más cómodamente preservando el ambiente en el que vivimos”, detalló.
Posteriormente, dio algunas percepciones propias acerca del momento que tuvieron que vivir las personas durante esta pandemia: el confinamiento, lo que llevó a algunos fenómenos no tan usuales de ver.
“Descubrimos que el agua se volvía más transparente, que el cielo y el aire se hacían más respirables, que la tierra se volvía más tierra y más productiva, que había animales salvajes que, en muchas localidad, empezaban a salir. ¿Y saben por qué cambió el mundo? Porque los que nos encerramos fuimos nosotros”, sentenció.
“Yo creo que esta ley es muy importante porque estamos generando consciencia en las nuevas generaciones, desde pequeño, de la importancia de cuidar el medio ambiente (…). Todo eso puesto en cada día de escuela va a hacer que se vuelva cotidiano el entender que es mejor vivir en un mundo donde la vida no se convierta en un riesgo, donde el comer no se convierta en un riesgo, donde tomar agua no se convierta en un riesgo, donde respirar no se convierta en un riesgo. Y eso debemos hacerlo con educación. Hoy estamos dando un paso, yo creo, muy importante, pero no para el futuro; para el presente”, finalizó.