Luego de dos meses y medio de ventas externas a ese destino, por falencias en el sistema de sanidad y certificaciones, se reabre una oportunidad de comercio exterior para la carne que más se consume en nuestro país.
Mientras siguen cerradas las exportaciones bovinas, para la carne de pollo se vuelve a abrir una ventana clave, Europa, desde donde le compran a nuestro país las supremas, o pechugas, especialmente desde España, Países Bajos, Inglaterra y Suiza. En rigor, las reses vacunas que llegan al Viejo Continente vía la cuota Hilton también están habilitadas.
Con todo, desde este martes, la Argentina podrá reanudar las ventas externas de carne aviar con ese destino, que se autoimpuso desde el 13 de marzo, luego de unas observaciones realizadas por la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria (DG Santé) de la Unión Europea (UE).
En 2020 el sector aviar argentino exportó por 240.000 toneladas, una caída del 11% interanual respecto de las 270.000 que se embarcaron el año anterior. Con el empleo de unas 75.000 personas en distintas provincias, en la Argentina se faenan unos 80 millones de pollos por mes.
La actividad abastece un consumo interno mensual por habitante de unos 4 kilos por habitante, que anualizado oscila en torno a los 50 kilos, lo cual este año superó a la ingesta por argentino de la carne vacuna, que hoy se estima en 47 kilos por habitante por año.
Aval de la UE
En una reunión audiovisual que representantes de la DG Santé mantuvieron con autoridades del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) se confirmó que las medidas correctivas tomadas por el organismo argentino satisfacen las observaciones realizadas durante la auditoría virtual de fines de 2020.
En ese sentido, se convino que cuando la DG Santé reciba la nota formal enviada por nuestro país aceptará el levantamiento de la autosuspensión.
La medida de la UE valora los avances y garantías ofrecidos por el Senasa, presentó un plan de trabajo con medidas correctivas y fortalecimiento de controles y vigilancia en el sistema de sanidad aviar y certificación de carnes y productos aviares.
“Hoy tenemos una muy linda noticia”, dijo el presidente del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA), Roberto Domenech, quien además, ponderó el “trabajo público-privado muy importante en el cual el compromiso es de todos” para arribar a este reinicio de exportaciones. Asimismo, el empresario felicitó al Senasa “por la responsabilidad y la velocidad y el compromiso con que asumió toda esta tarea”.
Según señalaron desde Senasa, las falencias en laboratorio y vigilancia pasiva detectadas por la auditoría virtual de la UE al sistema de exportación de carnes y productos aviares databan de 2019 y años anteriores”, por lo que se consideró que lo más pertinente era autosuspender las exportaciones a ese destino del 13 de marzo al 31 de mayo de este año.
Una vez que la UE aceptó la decisión preventiva, en el Senasa se activó el trabajo para corregir las observaciones. Durante este tiempo hubo diferentes video reuniones de los equipos técnicos de la DG-Sante de la UE y del Senasa, que realizó varias mejoras en el sistema de vigilancia pasiva, trabajadas en el 2020 e implementadas en el 2021 y consideradas satisfactorias por la Unión Europea.
Fuente: TN/Campo