El presidente de EE.UU. se puso al hombro la campaña de vacunación, ante la baja concurrencia a los centros.
Ya aplicaron 300 millones de vacunas, pero ello representa al 65% de la población y no alcanza para lograr la inmunidad de rebaño.
Así, se ha referido a la variante Delta como una cuestión de “seria preocupación”, porque, como ha añadido, “es más fácilmente transmisible, potencialmente más letal y particularmente peligrosa para los jóvenes”.
Ante ello, se ha llamado a la población a protegerse con la vacunación. “Si aún no se ha vacunado, hágalo ahora. Ahora. No lo pospongas. Es gratis. Es fácil. Es conveniente”, ha aseverado el mandatario estadounidense.
De este modo, ha celebrado que Estados Unidos haya llegada este viernes a 300 millones de vacunas aplicadas en los 150 primeros días de su Administración, lo que supone el 65 por ciento de la población con al menos una dosis.
“Es un hito importante que simplemente no sucedió por sí solo o por casualidad. Se necesitó el ingenio de los científicos estadounidenses, la capacidad total de las empresas estadounidenses y una respuesta de todo el Gobierno a través de los gobiernos federales, estatales, tribales y locales”, ha incidido.