Una firma de servicios agropecuarios logró cerrar el primer negocio de cebada orgánica para la elaboración de cerveza certificada a gran escala.
A medida que los productos orgánicos ganan terreno, el sector agropecuario muestra su potencial. A las alternativas de cultivo para los productores se suma la cebada. La empresa Tomás Hermanos está en búsqueda de nuevos campos con certificación orgánica que quieran incursionar con la producción de este tipo de cereal.
Negocio con cebada orgánica
La firma de servicios agropecuarios anunció que logró cerrar el primer negocio de cebada orgánica para la elaboración de cerveza orgánica certificada a gran escala. Se trata de un campo de 70 hectáreas en Bolívar que en diciembre próximo cosechará el cereal. Al establecimiento se sumará otra hacienda de extensiones similares en Córdoba y se espera que también se agregue un tercer campo, aunque aún no trascendió el tamaño.
“El año pasado y en 2019 ya hubo una pequeña cantidad de cebada orgánica en la Argentina y por suerte tuvo mucho éxito. Este año ampliamos el nivel productivo y la producción será más grande, porque ya hay un interés por parte de la maltería y de los consumidores”, destaca Juan Pablo Yaquinta, coordinador de Siembras Asociadas de Tomás Hermanos. La firma actúa como el lazo entre la materia prima de los productores, la cebada, y la maltería, que será la encargada de comercializar la cerveza “ecológica”.
Desde hace varios años que la compañía es proveedora de cebada cervecera común y en la actualidad se encuentra desarrollando de forma incipiente el negocio de este tipo de cebada.
Cebada: una alternativa para los productores
Hace un tiempo que la empresa comenzó a trabajar con productores de 25 de Mayo y 9 de Julio que están enmarcados en el proyecto de carne “ecológica”. “Nos propusieron conocer a productores orgánicos para ver qué posibilidades había de hacer negocios juntos y empezamos a buscar alternativas para ofrecerle a este tipo productores”, recuerda Yaquinta.
“Algunos clientes estaban bajo la modalidad orgánica de producción y, como veníamos trabajando con la maltería y ellos ya estaban en el camino de lo orgánico, decidimos unir los puntos”, aclara Juan Borla, líder de Originación de la firma.
Crecimiento a nivel volumen
Desde la empresa indican que el objetivo es que el área crezca y “empujar” este nuevo proyecto. “Estamos con ánimos de crecimiento a nivel volumen y buscamos productores orgánicos que quieran hacer cebada cervecera”, insiste Borla.
En la actualidad la firma comercializa 1.300.000 toneladas en general y el objetivo es aumentarlas a 2 millones en los próximos cinco años, incluyendo la “pata” orgánica. Por su parte, la maltería espera superar las 25.000 hectáreas sembradas de cebada “ecológica” en los próximos años.
Los ejecutivos aclaran que se trata de un proyecto inminente que está en una fase de aprendizaje y búsqueda de alternativas de negocio para los productores orgánicos. “No tenemos una meta de hectáreas, sino que tenemos una gran necesidad de conocimiento para ver de qué manera se puede ofrecer dentro del abanico de productores que están dispuestos a asociarse”, añade Yaquinta.
Para acceder al certificado de campo orgánico es necesario tener no menos de tres años sin aplicación de ningún tipo de insumo sintético, como fitosanitarios, fertilizantes y herbicidas) y sembrar exclusivamente semillas provenientes de campos “ecológicos” certificados, entre otras regulaciones.
