El ministro Matías Lammens dijo que el gobierno tiene “toda la voluntad de que haya temporada de invierno” y destacó que los casos siguen bajando. Mendoza solicitó que se habilite el turismo interno y otras provincias se sumaron.
“Tenemos toda la voluntad de que haya temporada de invierno. Los casos están bajando y tenemos expectativa de que la curva siga descendiendo”, dijo ayer el ministro de Turismo, en un anticipo de la postura dominante en el Gobierno. A algo menos de un mes del inicio formal de la temporada, y a pesar de los recaudos que imponen las nuevas variantes del virus y la eventual tercera ola, cerca del ministro dan cuenta de “una situación que cambió para bien” y que alimenta las expectativas de unas vacaciones que también mejoren el clima general, de cara a las elecciones legislativas.
En el Gobierno admiten que Mendoza, dónde gobierna el radical Rodolfo Suárez, fue de las primeras provincias en reclamar habilitaciones que fomenten la temporada invernal, un pedido al que luego se sumaron provincias del sur del país, también en búsqueda de los indispensables ingresos que les brinda el turismo. “Tenemos vacunados a la mayoría de los hoteleros, al sector del transporte, a los gastronómicos. Estamos listos para la temporada”, afirman a La Nación desde el gobierno de Mendoza. Suárez también pide reabrir el turismo de la provincia con la vecina Chile, aunque la aparición de la cepa Delta encendió las alarmas y desde el Gobierno descartan la reapertura de fronteras.
Hoy por hoy, las únicas tres provincias que mantienen restricciones al turismo para su propia población son Córdoba, Catamarca y Santiago del Estero. “Estamos en un piso muy alto, hay que seguir bajando los casos, pero la tendencia es positiva”, afirman en el gobierno nacional.
Como dato alentador, en Turismo tomaron nota de las recientes declaraciones del ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán, defensor habitual de las restricciones, que esta vez fue optimista respecto de las vacaciones. “El turismo cuidado va a poder hacerse”, dijo el ministro a C5N, y agregó que en el país hay un descenso muy fuerte de los casos de coronavirus. Los indicadores bajan, “principalmente por las medidas de cuidado que se tomaron y por la vacunación”, destacó. En el Gobierno no desconocen que en varias oportunidades las decisiones de las autoridades sanitarias que responden al gobernador Axel Kicillof terminaron convirtiéndose en políticas nacionales.
Lammens, que la semana pasada tuvo una reunión preliminar con el Consejo Federal de Salud y estuvo en contacto “permanente” con el ministro del Interior, Eduardo de Pedro (a cargo del control fronterizo), espera la “luz verde” de Vizzotti para transmitirle la buena nueva a las provincias.
