La aeronave Airbus 330-200, matrícula LV-GHQ aterrizó a las 18.02 en el aeropuerto internacional de Ezeiza, transportando 768.000 dosis de la vacuna fabricada en China, tras haber despegado desde Beijing el lunes a la tarde.
Argentina superó este miércoles los 23,8 millones de vacunas recibidas desde el inicio de la pandemia, tras el arribo al país procedente desde China un vuelo de la compañía Qatar Airways, con una carga de 464.000 dosis, que permitirán completar un lote de dos millones de fármacos producidos por la empresa Sinopharm.
Entre lunes y este martes, Aerolíneas Argentinas concretó otros dos vuelos a Beijing que transportaron cada uno 768.000 mil dosis en sus bodegas que se sumarán al cargamento de la línea qatarí que arribará miercoles al aeropuerto de Ezeiza.
La aeronave Airbus 330-200, matrícula LV-GHQ, bajo el número AR1067, aterrizó a las 18,02 en el aeropuerto internacional de Ezeiza, transportando 768.000 dosis de la vacuna fabricada en China, tras haber despegado desde Beijing ayer a la tarde y hacer una escala técnica en Madrid para reabastecimiento de combustible.
En la estación aérea el avión fue recibido por el ministro de Deportes y Turismo, Matías Lammens y el titular de la compañía de bandera, Pablo Ceriani.
Lammens señaló ante los medios de prensa presentes en Ezeiza que “este vuelo con una nueva partida de vacunas nos renueva la esperanza al seguir aportando dosis al ritmo de vacunación que se está llevando adelante y que nos hace tener esperanza de que muy pronto podamos volver a tener el ritmo que teníamos antes de la pandemia”.
El funcionario aseguró que en la cartera de Turismo se está trabajando “para poder tener temporada de invierno”, aunque aclaró que “todo va a depender de la condición sanitaria, pero la llegada de vacunas y la forma en que se está vacunando nos hace pensar que podremos tener una temporada como la de verano, con todos los cuidados”.
La aeronave Airbus 330-200, matrícula LV-GHQ había despegado ayer del aeropuerto internacional de Beijing a las 16,24 y antes de su llegada a Ezeiza, realizó una escala técnica en Madrid para reabastecimiento de combustible.