Desde el 1 de junio, Google Fotos ya no ofrecerá almacenamiento ilimitado en forma gratuita. El tope será 15GB y en ese volumen hay que incluir el contenido alojado en Drive y Gmail. Dicho en otras palabras, las fotos y videos restarán a los 15GB gratuitos disponibles.
No hay vueltas: los que necesiten más espacio deberán pagar una suscripción. ¡Clin caja! O bien migrar hacia otros servicios.
Hay un detalle fundamental para tener en cuenta: el cambio aplicará al contenido que se cargue a partir de junio y, en tanto, todas las imágenes y videos que se suban hasta esa fecha seguirán dentro del plan gratuito que rigió desde el lanzamiento de Fotos, allá por 2015.
Otro detalle a considerar: el plan ilimitado fue válido para el contenido que se almacena en “alta calidad” (se comprime apenas) y no en “calidad original”. A partir de ahora, todas las fotos ocuparán espacio incluso cuando las subas en el formato ligeramente comprimido.
El almacenamiento no se termina en la nube. Aunque los servicios cloud han eclipsado a los medios físicos, éstos aún son útiles especialmente cuando la plataforma que siempre usaste anuncia que se termina el uso ilimitado.
En ese sentido, una buena forma de solucionar la disyuntiva que plantea el cambio de era en Google Fotos es hacer una copia de seguridad de tus imágenes y videos en un disco rígido. Podés usar el de tu computadora o uno externo. Otra buena idea es reutilizar una notebook o PC en desuso y usarla como medio de almacenamiento