El presidente de Brasil fue ingresado esta mañana al centro de salud de las Fuerzas Armadas en Brasilia para hacerse exámenes. En los últimos 10 días, se había quejado por un repetido malestar.
De acuerdo a lo que anticipó O Globo, se está sometiendo a exámenes y, por el momento, no hay más información. En los últimos 10 días, se había quejado por un repetido malestar.
En un breve comunicado, el Palacio de Planalto informó que el jefe de Estado, bajo la guía de su equipo médico, fue ingresado en el Hospital de las Fuerzas Armadas para realizarse exámenes para investigar la causa del dolor y del hipo que le produce la molestia.
“Por consejo médico, el presidente estará en observación por un período de 24 a 48 horas, no necesariamente en el hospital. Está animado y bien”, dice la nota.
El Tribunal Supremo Federal anunció que se canceló la reunión entre los presidentes de los poderes Judicial, Ejecutivo y Legislativo, que se iba a realizar este miércoles a las 11:00. También se postergó el encuentro del comité de coordinación para combatir la pandemia, que estaba programado para las 8:00, informó la presidencia del Senado.
La salud de Bolsonaro ha sido un problema durante su presidencia, luego de que fuera apuñalado y gravemente herido durante la campaña electoral en 2018.
En total, lo operaron cinco veces en los últimos dos años. La última fue una cirugía para extirparle un cálculo en la vejiga, mientras que las otras cuatro estuvieron relacionadas con la puñalada. Además, en julio del año pasado tuvo coronavirus.
El periódico Folha de San Pablo detalló que hace días Bolsonaro venía con la molestia y que, en un encuentro con seguidores, dijo que no podía hablar mucho porque eso le ocasionaba hipo.
El hipo son contracciones involuntarias del diafragma, el músculo que separa el pecho del abdomen y que tiene un papel importante en la respiración. A cada contracción le sigue un cierre repentino de las cuerdas vocales. Los exámenes son para determinar qué es lo que le causa esas contracciones de forma tan seguida.