El centro operativo nacional para la lucha contra el coronavirus informó 25.766 nuevos casos en la última jornada, el número más alto desde el 2 de enero, con lo que el total se elevó a más de 5,73 millones, uno de los brotes más grandes del mundo.
Las 726 muertes estuvieron por debajo del récord de 737 informado el martes pasado y de las 734 anunciadas ayer.
Rusia acumula hasta ahora 151.501 fallecimientos por el virus, dijo el organismo ruso, la cifra más alta para un país de la zona Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La capital, Moscú, figuró un día más como la ciudad con más casos, con 6.643, dijo el organismo ruso.
El repunte de casos y fallecidos ha sido achacado a la variante Delta, que fue detectada por primera vez en India y es mucho más contagiosa, según han indicado las autoridades durante los últimos días.
A diferencia de algunos otros países golpeados por la variante Delta, en Rusia el incremento de casos se está acompañando también de altas cifras de muertes debido a que la población es altamente reticente a vacunarse.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha instado en repetidas ocasiones a la población a recibir alguna de las vacunas fabricadas por Rusia.
Ante el avance de la enfermedad, Moscú restringió el mes pasado el acceso a restaurantes y bares de personas que no puedan acreditar que están vacunados, que ya tuvieron la enfermedad o que no la tienen.
El alcalde de Moscú, Serguei Sobianin, dijo ayer que la ciudad podía abstenerse de nuevas restricciones por ahora e incluso autorizó visitar los parques zoológicos y las áreas de juegos infantiles, deporte y recreo siempre que sea al aire libre.
Según el alcalde, en los últimos días la situación epidemiológica se está estabilizando en Moscú.