La australiana Jessica Fox mostró cómo arregló su kayak con un condón para ganar la medalla de bronce y dos días después no pudo contener los nervios y vomitó antes de la carrera que le dio una medalla de oro.
Jessica Fox es una estrella del canotaje con sus 10 títulos mundiales. En estos Juegos Olímpicos se coronó con dos medallas, una de oro en canoa de eslalon y otra de bronce en kayak.
La australiana de 27 años se convirtió en la primera campeona de Tokio 2020 en vomitar presa de los nervios antes de ganar la medalla dorada. Previo a la carrera, corrió a la parte trasera de un grupo de tiendas en el Kasai Canoe Slalom Center de Tokio sin que nadie la viera. Después se lo confesó a su madre y entrenadora: “Le dije que había vomitado. Yo estaba como, ‘Me siento muy bien, pero acabo de vomitar, así que estaré bien’. Y luego chocamos los puños”.
No es para menos. La atleta vio cómo se le escapada el oro olímpico dos días antes. El martes, su sueño de ganar el oro en los eslálones de C1 y K1 (el numeral indica que la nave está pilotada por un solo tripulante) se hizo añicos cuando dos golpes de pértiga en el kayak le valieron una penalización de cuatro segundos y le dieron el título a la alemana Ricarda Funk. Fox consiguió un bronce para sumar al que ganó en Río de Janeiro en 2016 y su plata en Londres cuatro años antes.
Lo llamativo fue el ingenio con el que Fox tuvo que arreglar su kayak para poder subirse al podio. Durante la competición su piragua se rompió y con su equipo decidieron probar algo único: usaron un preservativo en el sector dañado. “Apuesto a que nunca supieron que los preservativos pueden usarse para reparar kayaks”, escribieron en el video que publicaron en Instagram.
“Volver después de eso fue muy duro emocionalmente. Creo que reviví la carrera de kayak un millón de veces en mi cabeza”, dijo con la medalla de oro colgando del cuello. “Probablemente nunca he estado tan nerviosa como hoy”, añadió.
Fox se convierte de esta forma en la única palista que ha ganado medallas olímpicas tanto en eslalon de canoa como de kayak. La deportista tenía la presión adicional de los antecedentes familiares, ya que su madre y entrenadora, la francesa Myriam, fue dos veces campeona mundial y medallista de bronce en 1996, y su padre, el británico Richard, se llevó cinco títulos mundiales.
La británica Mallory Franklin y la alemana Andrea Herzog fueron plata y bronce respectivamente.
Franklin es la segunda mujer británica en ganar una medalla de eslalon en canoa, mientras que el galardón de Herzog significa que Alemania ha subido al podio en los tres eventos de eslalon hasta ahora en Tokio.
Los kayakistas de eslalon usan remos de dos palas y se sientan con las piernas delante. En las canoas, los remeros se sientan con las piernas debajo y usan un remo de una sola hoja.
Con información de Reuters