Examinarán rastros de pólvora en sus prendas y luego realizarán estudios de comparación haciendo disparos a una vestimenta testigo. Declararán más testigos.
La pericia de barrido electrónico para ver qué restos de deflagración de pólvora en las prendas que llevaba puestas Santiago “Chano” Moreno Charpentier cuando recibió un disparo el 26 de julio pasado se hará a fines de septiembre.
El 27 de ese mes en el Instituto de Ciencias Forenses de La Plata se realizará el estudio para primer ver los restos de pólvora y luego hacer disparos a una prenda testigo a variadas distancias con el mismo arma que utilizaba el policía bonaerense Facundo Amendolara.
Eso permitirá establecer la distancia que había al momento del disparo entre Chano y el policía, algo que todavía no está claro y por los testimonios algo controvertido: los policías compañeros de Amendolara dicen que estaba en riesgo la vida de él, y la familia del músico niega que haya querido atacarlo y que tenía en su poder un cuchillo de cocina.
Al no haber uniformidad en los testimonios, el fiscal de Zárate Martín Zocca apunta a esclarecer el caso mediante la pericia balísticia. Mientras tanto, sobre Amendolara pesa una imputación en su contra por lesiones gravísimas agravadas por el uso de arma de fuego y la condición de policía.
El fiscal Zocca esta semana avanzará con la declaración de otros dos testigos, uno de ellos policía que estaba lejos de la escena del hecho aquella madrugada en Exaltación de la Cruz, y un parquista de la familia de Chano que sólo fue testigo del procedimiento policial posterior al hecho.
