Los vecinos tratan de salvar lo que pueden de la erupción del volcán Cumbre Vieja en la isla de La Palma, en el archipiélago canario en España.
La erupción del volcán Cumbre Vieja ubicado en la isla de La Palma, en el archipiélago canario en España, que entró en erupción el domingo por la tarde, arrasó hasta ahora 154 hectáreas y destruyó 320 edificaciones, la mayoría viviviendas de zonas rurales, informó este jueves el sistema de medición geoespacial europeo Copernicus.
Un mapa actualizado “sitúa la extensión de la lava en 154 hectáreas y el número de edificaciones destruidas es de 320”, en contraste con las 185 edificaciones y 103 hectáreas de su informe anterior, explicó en un comunicado el sistema Copernicus.
Según las autoridades de La Palma, las cifras seguirán aumentando en las próximas horas a medida que la lava avanza inexorablemente hacia el mar.
Ese movimiento de lava se había previsto inicialmente que ocurriría el pasado lunes pero quedó demorado por la pérdida de velocidad, informó la agencia de noticias AFP.
Según la página del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), si la lava llega al mar puede generar explosiones, olas de agua hirviendo o incluso nubes tóxicas.
El Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) estimó hoy que la erupción podría durar “entre los 24 y 84 días, con una media geométrica del orden de los 55 días”.
El vocero de Involcan, David Calvo, señaló que la lava “en las últimas horas se ha ralentizado mucho, ahora está moviéndose a 300 metros la hora, quizá menos, porque está llegando a una zona muy plana”.
“Lo que está haciendo es ganar altura. Hay zonas en las que ya tiene 15 metros de espesor”, añadió Calvo.
En tanto, el presidente del Cabildo de La Palma, Mariano Hernández Zapata, escribió en Twitter se viven “días realmente duros” en el lugar.
“Escuchar a los que lo han perdido todo, y a los que saben que lo van a perder es frustrante”, concluyó.
El Cumbre Vieja estaba bajo fuerte vigilancia desde hacía una semana debido a una intensa actividad sísmica y, según Involcan, la erupción podría durar “varias semanas o algunos meses”.
La Palma forma parte del archipiélago de Islas Canarias, situadas al noroeste de la costa continental africana.
La lava podría tomar varios días para cubrir los 2 kilómetros que quedan hasta la costa, dijeron expertos, en medio de una actividad sísmica imprevisible.
Vecinos que confiaban en salvar algunas de sus pertenencias hacían fila en dos zonas designadas por las autoridades para ser escoltados al municipio. La lava avanzaba despacio en la distancia, a unos 120 metros por hora. El humo se alzaba al paso de la lengua de lava, que destruía todo en su camino.
Javier López dijo que la casa donde había vivido durante tres décadas parecía estar en el camino de la lava. Sus familiares y él se habían refugiado en casa de un amigo con unos pocos documentos, recuerdos familiares y objetos personales que pudieron llevarse cuando evacuaron el lunes.
“He metido toda una vida en mi furgoneta”, dijo a The Associated Press mientras esperaba su turno para tratar de recuperar un vehículo que había dejado atrás y otros objetos de valor.
Mientras las coladas de lava avanzaban hacia la costa de la isla, más poblada, unas 1.000 personas fueron evacuadas el martes por la noche de Todoque, lo que elevó a unas 6.000 el total de personas desplazadas.
Las autoridades dicen que se avecinan más peligros, incluyendo más sismos y posiblemente nuevos flujos de lava, gases tóxicos, cenizas volcánicas y lluvia ácida. Cuando la lava, que está a más de 1.000 grados Celsius (más de 1.800 grados Fahrenheit) llegue a un cuerpo de agua podrían producirse explosiones, aludes y nubes de gas tóxico.
Mientras la ceniza caía sobre una vasta área, las autoridades le aconsejaron a la gente que mantuviese a sus niños adentro lo mas posible debido a posibles dificultades para respirar.
La erupción volcánica y sus consecuencias inmediatas podrían prolongarse hasta 84 días, dijeron expertos el miércoles.
El Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN) dijo haber basado sus cálculos en la duración de erupciones previas en el archipiélago, que como en este caso incluyeron grandes coladas de lava y una actividad sísmica prolongada.
Desde que comenzó la erupción, ríos imparables de lava han consumido las viviendas en una zona rural.
Las evacuaciones preventivas han ayudado a evitar víctimas, aunque los daños a viviendas, infraestructuras y terrenos de cultivo son considerables, según las autoridades.
El volcán también ha expulsado cada día entre 8.000 y 10.500 toneladas de dióxido de azufre, que afecta a los pulmones, señala Involcan.
La vida en el resto de La Palma, que tiene aproximadamente 35 kilómetros de longitud y 20 kilómetros de ancho, no ha sido afectada, y los turistas siguen arribando para iniciar sus vacaciones. El tráfico aéreo proseguía normalmente.
Las Islas Canarias son un popular destino turístico para los europeos debido a su clima moderado durante casi todo el año.