Se trata de Carlos Ernesto Galeano, quien tiene 35 años y además agredió y amenazó a una mujer que era su pareja en un contexto de violencia de género.
Este martes, un policía de 35 años identificado como Carlos Ernesto Galeano fue condenado a tres años de prisión de cumplimiento efectivo por haberse resistido a cumplir una medida de exclusión del hogar en San Vicente, departamento Castellanos. También fue condenado por agredir a los uniformados que fueron a detenerlo a raíz de lo ocurrido minutos antes, y por ilícitos que cometió en perjuicio de su expareja en un contexto de violencia de género.
La sentencia fue impuesta por el juez Javier Bottero en un juicio en el que se abreviaron los procedimientos que se desarrolló en los tribunales de Rafaela.
La fiscal Favia Burella llevó adelante la investigación e indicó que “el condenado reconoció expresamente su responsabilidad penal por los hechos ilícitos que le endilgamos desde la Fiscalía”.
La fiscal detalló que “Galeano fue condenado como autor de los delitos de resistencia a la autoridad; atentado a la autoridad agravado (por el uso de arma); lesiones leves dolosas doblemente calificadas (por la relación de pareja y por violencia de género); y amenazas calificadas (por el uso de arma)
Los hechos
Burella afirmó que “pasadas las 15:00 del viernes 28 de mayo de este año, agentes policiales se acercaron a la vivienda en la que residía el condenado, ubicada en calle Jujuy al 500 de San Vicente, para comunicarle que debía cumplir una orden judicial de exclusión del hogar”. La fiscal agregó que “en ese marco, Galeano se atrincheró dentro de la casa junto a su hijo de muy corta edad”.
“El hombre de 35 años llevó a cabo su accionar delictivo con el fin de intimidar a los uniformados y con la pretensión de impedir el cumplimiento de la medida que, a pedido de su expareja, había sido dispuesta por un tribunal de Familia”, señaló Burella. En tal sentido, remarcó que “el condenado manifestó en reiteradas oportunidades que no estaba dispuesto a abandonar la vivienda”.
Según relató la funcionaria del MPA, “con el niño en brazos, Galeano aseguró que contaba con los elementos necesarios para provocar un incendio y una explosión de gas en el inmueble, lo que sin dudas iba a causar su muerte, la de su hijo y la de los policías que estaban en las inmediaciones”.
Asimismo, la funcionaria del MPA señaló que “a raíz de lo ocurrido, libramos una orden de detención de Galeano y una comisión policial fue al lugar a aprehenderlo”. Agregó que “en ese marco, el condenado amedrentó a un miembro de la fuerza de seguridad con un cuchillo, y al manipular el arma blanca, se generó una herida cortante en su propio cuello y debió ser hospitalizado”.
Por otra parte, Burella sostuvo que “el policía de 35 años fue condenado también por un hecho ilícito que cometió en contra de la mujer cuando mantenían una relación de pareja”. Contó que “en una ocasión en la que ella intentó irse de la vivienda, el hombre se lo impidió de forma violenta”, y destacó que “la tomó con fuerza y le propinó un golpe de puño”.
Narró que “a su vez, cuando la mujer expresó que no tenía interés en seguir conviviendo con el condenado, él utilizó su arma reglamentaria para infundirle temor”.