Michael Sayman es un joven de origen boliviano y peruano que vive en Estados Unidos y que se convirtió en millonario creando aplicaciones que llamaron la atención del propio Mark Zuckerberg, quien lo contactó para trabajar en Facebook.
A los 13 años, cuando su familia pasaba por un momento muy difícil económicamente, le llegó su primer cheque de Apple.
Luego vinieron otros pagos, reconocimientos y una carrera brillante, mientras sus padres casi no podían comprender cómo había pasado.
Con 17 años, Michael Sayman se convirtió en el empleado más joven de Facebook después de que su fundador, Mark Zuckerberg, quedara impresionado de su capacidad creativa a la hora de diseñar juegos interactivos.
“Estaba en clase de matemáticas, en mi colegio, cuando recibí un correo electrónico del equipo de Facebook en el que decía que Mark Zuckerberg quería conocerme. Al principio pensaba que era falso, pero me di cuenta de que no lo era”, relató el joven de 25 años durante una entrevista con la Voz de América.
Con 13 años, Sayman “usando la computadora de casa” descubrió que su verdadera pasión estaba lejos de lo que querían hacer el resto de sus compañeros de clase. A través de manuales que encontró en Google, se puso a estudiar programación y logró diseñar una aplicación con la que pudo ganar miles de millones de dólares, y así ayudar a su familia que estaba sufriendo los estragos de la recesión económica del 2009.