Se trató de la primera apreciación del gobernador Omar Perotti en torno a la investigación que involucra a su exministro de Seguridad.
El gobernador santafesino Omar Perotti concluyó esta noche una jornada maratónica de reuniones con distintos funcionarios nacionales, en Buenos Aires.
El mandatario ingresó a los despachos del Ministro de ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, de Seguridad Aníbal Fernández, del Jefe de Gabinete Juan Manzur y el propio Presidente Alberto Fernández.
Con cada uno analizó cuestiones distintas, aunque centro en el prioritario tema de seguridad, que estuvo presentes en las conversaciones de casi todos, con la sola excepción de Cabandié.
Perotti dijo a algunos periodistas que lo esperaron a la salida de Casa de Gobierno, que “fue una reunión de rutina, para repasar lo realizado en materia del plan de seguridad”, y agregó que el gobierno nacional “no puede permitir que ocurra lo que ocurre en Rosario”.
“Si hay que reforzar se reforzará”, indicó el santafesino al hablar del desembarco de fuerzas nacionales, tras lo cual pidió ajustar controles en cárceles para evitar que se ordenen hechos y cubrir vacancias en juzgados federales. “No se puede enfrentar el delito con la misma estructura raquítica de la justicia federal”, dijo a la prensa.
Al referirse por primera vez al escándalo desatado con allanamientos inclusive al despacho que le perteneció al exministro de seguridad de su gestión, Marcelo Saín, Perotti respondió escuetamente “la justicia contará con nuestro respaldo” y llamó “hecho puntual” al desembarco de Saín en el gabinete de Aníbal Fernández.