El país vive una serie de protestas por las exigencias y restricciones impuestas por el Gobierno y este curioso kit tiene que ver con esa batalla: quienes tienen Covid y lo reportan, logran acceder al código QR que les permite entrar a lugares públicos sin necesidad de haberse vacunado.
El movimiento antivacunas de los Países Bajos encontró en la insólita venta de un kit para autocontagiarse la Covid-19 una herramienta más de su lucha y hasta una manera de sumar un ingreso, informó este martes la prensa internacional.
Con una demanda alta, un sitio vende un paquete que contiene una dosis de líquido infectado con Covid-19 para quienes desean autocontagiarse con el virus y un test de antígenos para verificar que el comprador logró contraer la enfermedad.
Para el caso de que el intento falle, el comparador puede pedir una nueva entrega, esta vez a un precio menor.
Plaza fuerte del combate a las vacunas, Países Bajos vive una serie de protestas por las exigencias y restricciones impuestas por el Gobierno y este curioso kit tiene que ver con esa batalla: quienes tienen Covid y lo reportan, logran acceder al código QR que les permite entrar a lugares públicos sin necesidad de haberse vacunado.
Aunque el sitio ya no funciona, se hicieron muchas entregas del kit, según el sitio web de la televisora rusa RT, a un valor de 33 euros, con entrega a domicilio.
En las indicaciones del producto “Sí, quiero el coronavirus”, se aconsejaba a los compradores quedarse en sus casas si tenían malestares y cumplir con las recomendaciones gubernamentales.
El país atraviesa una fuerte suba de casos e internaciones, en medio de fuerte protestas contra las restricciones y con enormes sectores que se niegan a recibir la vacuna, lo que complica las relaciones con el resto de las naciones del continente.
Bares, restaurantes y negocios considerados esenciales cierran a las 20 y el resto de comercios a las 18, y se exhorta a los ciudadanos al teletrabajo y a no recibir a más de cuatro personas en casa.
El Gobierno también presentó ayer al Parlamento un proyecto de ley para implantar el pasaporte sanitario de personas vacunadas y recuperadas de la enfermedad en bares, restaurantes y otros lugares públicos. El proyecto será debatido la semana próxima.