Durante un encuentro con los representantes del máximo tribunal, el Ministro de Justicia recordó que durante el gobierno del expresidente Mauricio Macri “se desplegó un sistema de espionaje ilegal con participación de jueces y fiscales”.
El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Martín Soria, le expresó a los cuatro miembros de la Corte Suprema su “preocupación por la gravedad institucional a la que llegó la Justicia argentina en los últimos cinco años”, y solicitó que el tribunal establezca “plazos máximos” para sus fallos, durante el primer encuentro institucional que mantuvo hoy con el máximo tribunal.
En ese marco, el funcionario le expresó particularmente a los integrantes del máximo tribunal su preocupación por la “mesa judicial” que se armó durante el Gobierno de Mauricio Macri para “presionar” a los magistrados.
Soria fue recibido a las 10 en el Salón de Embajadores del Palacio de Justicia por el presidente de la Corte, Horacio Rosatti; el vicepresidente, Carlos Rosenkrantz; y los ministros Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti.
El encuentro se prolongó durante 40 minutos y básicamente fue un exposición crítica del ministro sobre la actuación de la Justicia y también de la misma Corte.
“Se conformó una mesa judicial del Poder Ejecutivo que influía ilegalmente en la administración de justicia, se llevaban a cabo visitas obscenas entre funcionarios judiciales y las máximas autoridades del ejecutivo en la Casa Rosada y en la Quinta de Olivos, y se desplegó un sistema de espionaje ilegal con participación de jueces y fiscales inédito en nuestra historia”, aseguró Soria durante la reunión que mantuvo con los miembros de la Corte, según un comunicado de la cartera de Justicia y Derechos Humanos.
El ministro también criticó durante la reunión el funcionamiento de la misma Corte que “retrasa durante años fallos de enorme trascendencia social”.
En particular, el ministro se refirió al caso Blaquier, vinculado al episodio represivo conocido como la “Noche del Apagón” en Jujuy, o el caso por la muerte de Santiago Maldonado, en el que la familia viene pidiendo la intervención del alto tribunal.
“Mientras tanto –continuó Soria recreando su exposición ante la Corte-, resuelve en tiempo récord fallos que sólo son urgentes para la corporación judicial, como el caso de los jueces Bruglia y Bertuzzi”.
Bajo esa perspectiva, el ministro de Justicia señaló en la reunión que “la Corte tiene la posibilidad y la responsabilidad institucional de establecer plazos máximos para resolver, más aún cuando esta Corte resuelve más del setenta por ciento de los casos sin dar fundamentos”.
Soria se refirió así al artículo 280 del Código Procesal Civil y Comercial, que señala que “la Corte, según su sana discreción, y con la sola invocación de esta norma, podrá rechazar el recurso extraordinario, por falta de agravio federal suficiente o cuando las cuestiones planteadas resultaren insustanciales o carentes de trascendencia”.
En ese sentido, señaló la “llamativa anticipación mediática de futuros fallos judiciales, tanto de la Corte como de los tribunales inferiores” y no mencionó el proyecto de reforma del Consejo de la Magistratura que el gobierno envió al Congreso, como anticipaban que haría los medios con mayor circulación.
“El Congreso puede sancionar todas las leyes que sean necesarias para reformar la justicia pero, si en última instancia, la Corte no tiene la voluntad y el compromiso de aplicarlas, seguiremos en la misma situación”, planteó.
Soria, por último, criticó el proceso de elección del presidente del tribunal Rosatti cuando, siempre según su versión, les dijo a los cuatro magistrados que “el pueblo argentino es profundamente democrático: si la máxima autoridad del Poder Judicial se elige con dos auto-votos, difícilmente la sociedad recupere la confianza en la Justicia”.
La Corte Suprema, por su parte, no informó sobre el encuentro ni por su canal oficial, el Centro de Información Judicial, ni por sus voceros habituales.
Fuente: Telam