Un experto de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard señaló que la limpieza profunda puede afectar el sistema inmunológico.
Robert H. Shmerling, miembro de la Facultad de Medicina de Harvard y editor senior de la Harvard Health Publishing, señaló que bañarse todos los días no sería una práctica beneficiosa para la salud.
Shmerling analizó las ventajas y desventajas que conlleva este hábito y sostuvo que, por un lado, bañarse todos los días evita preocupaciones por el olor corporal pero también recordó que esto puede variar mucho entre las diferentes culturas y sociedades.
El especialista advirtió que la costumbre de bañarse todos los días está siendo seriamente afectada por el consumismo: “¿Alguna vez notaron que las instrucciones en las botellas de shampoo a menudo dicen ‘hacer espuma, enjuagar, repetir’? No hay una razón convincente para lavarse el cabello dos veces en una misma ducha, pero como se usa más shampoo, las compañías de belleza así lo recomiendan”.
Entre las desventajas que terminan por convertir en perjudicial bañarse se destacó que la piel de las personas cuentan con diversas bacterias, entre las cuales algunas son beneficiosas para su salud y otras no, siendo el equilibrio entre ambas primordial.
“La piel normal y sana mantiene una capa de grasa y un equilibrio de bacterias buenas y otros microorganismos que son eliminados al lavar y refregar, especialmente si el agua está muy caliente”, recalcó.
El representante de Harvard aseguró que con una ducha al día “la limpieza absoluta no le permite trabajar al sistema inmunológico ni fortalecerse. De hecho, algunos pediatras y dermatólogos no recomiendan los baños diarios para los niños”.
Por último, Shmerling indicó que no existe una frecuencia ideal de aseo personal, los expertos sugieren que ducharse varias veces por semana es efectivamente suficiente para la mayoría de las personas. Eso sí, aconseja que se debe intentar reducir el tiempo de baño a 3 o 4 minutos.