El Presidente brindará el tradicional discurso para dar cuenta del estado de la Nación y anunciar las iniciativas que enviará el Gobierno al Poder Legislativo.
El presidente Alberto Fernández oficializó la convocatoria a la apertura de sesiones ordinarias para el próximo martes 1º de marzo, ocasión en la que brindará el tradicional discurso para dar cuenta del estado de la Nación y anunciar las iniciativas que enviará el Gobierno al Congreso.
A través del Decreto 92/2022, publicado este miércoles en el Boletín Oficial, el mandatario indicó que la reunión de la Asamblea Legislativa se llevará a cabo el primer día del próximo mes a las 12. En ese marco, tal como lo establece el inciso número ocho del artículo 99 de la Constitución, Alberto Fernández dará cuenta del estado de la Nación y anticipará algunos de los proyectos que enviará al Congreso.
El discurso será transmitido por cadena nacional, de acuerdo a lo que fija el artículo 75 de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
“Desde diciembre los ministerios envían informes de gestión a la Secretaría General de la Presidencia que va trabajando los informes junto con Alejandro Grimson, que es quien hace la propuesta de discurso al Presidente y terminan de trabajarlo juntos”, graficaron fuentes oficiales a Noticias Argentinas. En la apertura de sesiones ordinarias, el mandatario buscará instalar una serie de temas que serán los “centrales” para el período que resta de su mandato.
Una de las iniciativas que anunciará en el Congreso será un Plan de Salud Mental que permita abordar los traumas derivados de la pandemia del coronavirus. Dentro de la serie de temas que serán prioritarios en la próxima etapa del Gobierno se encuentran los proyectos abocados al desarrollo económico y aquellos vinculados al ambiente y el cambio climático.
Además, la cuestión de género será otro de los grandes ejes, motivo por el que desde el oficialismo se trabaja en un proyecto para licencias compartidas por el nacimiento de un hijo, con el fin de que genere un mayor equilibrio en las tareas de cuidado.
El objetivo del Presidente y su equipo es que el discurso del próximo 1º de marzo funcione como “un momento bisagra” para su gestión, en el que una vez superado el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y los momentos más críticos de la pandemia pueda enfocarse en los temas por los que el Ejecutivo “quiere ser recordado”.