El subsecretario de Prevención y Control Urbano del Ministerio de Seguridad, Claudio Brigioni, se refirió a la llamada telefónica amenazante que ingresó en la noche del miércoles a través del sistema 911 y que anuncia represalias contra efectivos de la Unidad Regional II.
La Policía de Rosario se encuentra en estado de alerta tras recibir una amenaza efectuada desde un teléfono celular por parte de una persona que se identificó como “familiar de los Cantero”. El hombre primero pidió hablar con el máximo responsable de la Unidad Regional II y luego pidió que se transmitiera a la autoridad un mensaje: “Que se aguante el vuelto porque esta noche tumbamos a siete”.
Mientras la Justicia investiga el origen del llamado se dispuso un refuerzo de vigilancia en distintos puestos policiales.
“Recibimos esa llamada y dispusimos un alerta, con precisas instrucciones para el personal policial que trabaja en la calle y estaremos abocados a eso, independientemente de la investigación que lleve adelante el fiscal en turno y la Agencia de Investigación Criminal”, sostuvo Brigioni.
Asimismo, señaló que la situación de alerta implica “mayor presencia y actividad policial en los puntos críticos y mayor coordinación entre las fuerzas de seguridad e intercambio permanente de información”.
Brigioni afirmó que en las últimas horas hubo una reasignación de patrullajes en algunas zonas de la ciudad. “Esto se llevó adelante en puntos que son supervisados por las fuerzas federales y que se conocen como poligonales. Hicimos algunos ajustes. Y hemos pedido a las fuerzas federales más presencia en barrios como Nuevo Alberdi, Santa Lucía y por supuesto otro punto especial como Ybarlucea”, detalló.
La llamada amenazante se recibió este miércoles a las 22 e ingresó por la central de emergencias 911. Según trascendió, un hombre que dijo llamarse Rubén Cantero, primero pidió hablar con el jefe de la Unidad Regional II y le advirtió al operador: “Decile a tu jefe que se aguante el vuelto porque esta noche tumbamos a siete”.
