Desde el Foro de Adicciones Rosario y la Pastoral Católica, indican que en los barrios más carenciados el consumo de sustancias comienza entre los 9 o 10 años.
Distintas agrupaciones y asociaciones rosarinas o regionales contra las adicciones hacen un trabajo artesanal y muy a pulmón para rescatar a quienes caen en el consumo de drogas y aseguran que “todos los días se mueren pibes y no nos enteramos”.
La asociación civil Miradas año tras año pide una nueva ley de drogas y lleva adelante la campaña “Acompañe, no castigue”. La asociación local Nazareth duplicó las consultas de asistencia por consumo.
Se duplicaron los pedidos de ayuda para salir de situaciones de violencia, de lazos familiares o sociales rotos, de estados de salud y mental fragmentados, y de la desesperación o depresión que todo esto conlleva.
Se plantea la desinformación como otra de las causas de esta problemática. No solo del periodismo a la hora de contar estas historias, sino también en las guardias de los hospitales los médicos no están preparados para atender situaciones de crisis. Los trabajadores del Estado tampoco están al tanto de cómo abordar distintas situaciones vinculadas al consumo problemático en los efectores públicos. Y lo que necesitamos además es una reforma a la ley nacional.
Fabián Belay, de la Pastoral de la Drogadependencia de Rosario, dijo en emisora rosarina LT8 que el incremento en las adicciones es consecuencia de la pandemia, cuando la escuela y los clubes de barrio tuvieron sus puertas cerradas. “Esto se venía dando en los barrios, pero lamentablemente se agravó. Se suma la falta de políticas del Estado municipal en cuanto a prevención y asistencia. Se intenta tener respuesta en los hospitales, donde también están ocupados por la atención del Covid y la atención de salud mental y adicciones ha quedado relegada”.
“Vemos gente muerta, adolescentes, jóvenes que no pasan los 25 años y que para entonces ya viven en situación de calle, ya sin vínculos con una familia que los contenga. Pareciera que algunos sectores de la política se quedaron con privilegios y han dejado su deber de ocuparse“, cuenta el sacerdote.
Por su parte integrantes de la ONG Madres Territoriales también piden ayuda para hacerle frente al problema de las adicciones en Rosario y la región.
En la ONG realizan un trabajo integral con asistentes sociales, psicólogos y médicos, pero tienen muchas necesidades. Uno de los padres de la organización, sentenció: “Todos los días se mueren pibes, hoy mueren 20 en Buenos Aires, en Rosario también pero no nos enteramos ”.