El europeo sacó a relucir su experiencia para remontar un difícil choque ante el sorpresivo chileno Tabilo, que había llegado de la clasificación para dejar en el camino en la semifinal nada menos que al “Peque” Schwartzman.
El español Albert Ramos-Vinolas (44ro. del ranking mundial) sacó ayer por la noche a relucir su experiencia para remontar un partido que comenzó en forma adversa y se consagró esta noche como campeón del ATP de Córdoba al vencer en tres sets al chileno Alejandro Tabilo (144to.), revelación del torneo y surgido de la clasificación.
Con parciales de 3-6, 6-4 y 6-3, el ibérico salió a sacar su aplomo y temperamento para lograr su quinto título ATP. El español, sexto favorito del certame, había llegado a la final tras vencer al cordobés Juan Ignacio Londero, mientras que Tabilo había dado cuenta de otros dos argentinos, el prometedor Serbastián Báez y el favorito Diego Schwartzman.
Para vencer a Tabilo, un jugador que tuvo una semana especial y que se mostró listo para meterse entre los mejores, Ramos Vinolas dio vuelta un 0-3 que parecía imposible en el tercer set, a pura garra y con un tenis sin mayores brillos, aunque si con sapiencia en la ejecución.
“Sin vosotros hubiera sido muy difícil“, dijo el español al público, tras contar con el el apoyo local que había reclamado tras vencer al cordobés Londero.
También le dijo a un Tabilo desconsolado que sabía “lo duro” que era para él y que le deseaba lo mejor para lo que resta de su carrera. Finalmente, sostuvo que ya Córdoba se había transformado en un sitio para él y tras levantar el trofeo, se dedicó a festejar con champaña.