Aún resta detener a tres de los involucrados en la maniobra de secuestro y extorsión a la familia de Gastón Cabrera.
Los únicos dos detenidos de la banda que secuestró y pidió rescate por Gastón Cabrera, de 35 años, el pasado 22 de febrero, en la esquina de Maipú y Laprida de la ciudad de Santa Fe, fueron procesados y embargados por la decisión del Juzgado Federal número 2 de Santa Fe a cargo de Marcelo Martín Bailaque.
La decisión involucra a dos taxistas. Hugo Edgardo Soto, de 47 años, originario de San Francisco Solano, provincia de Buenos Aires, domiciliado en calle Figueroa N° 3785 del distrito La Guardia de la ciudad de Santa Fe y a Rodolfo Ariel Quiroga, de 34 años, con domicilio en calle Necochea 2756 de la ciudad de Santa Fe.
A ambos se los procesó como presuntos coautores penalmente responsables del delito previsto y penado por el art. 170 del Código Penal, agravado por el inc. 6° del mencionado artículo; de conformidad con lo establecido por los arts. 306 del texto penal, esto es el secuestro extorsivo de Cabrera.
Además, ambos fueron embargados por dos millones de pesos y sus detenciones fueron convertidas en prisiones preventivas, de acuerdo con la decisión tomada por el magistrado.
Los dos detenidos no fueron quienes retuvieron y secuestraron, apareciendo en las cámaras que grabaron el hecho ubicadas a metros de esa intersección, sino que cumplieron otros roles.
“Se encuentra acreditado que el secuestro fue perpetrado por Rodolfo Ariel Quiroga, Hugo Edgardo Soto y al menos otras tres personas hasta el momento no identificadas. Por otro lado, se ha acreditado una división funcional del hecho entre los sujetos intervinientes, en tanto Quiroga fue uno de los individuos que llevó a cabo el secuestro extorsivo mediante la planificación, logística, monitoreo de las negociaciones y aporte de información necesaria para establecer puntos de vulnerabilidad de la víctima, por conocimiento de su rutina y vínculo personal, y Soto fue el encartado de recoger la suma de dinero exigida a Elizalde para la liberación de su esposo”, indica el Juez en su decisorio.
Se dio cuenta además que, en el caso de Quiroga, sería quien habría dejado a una cuadra de donde ocurrió el secuestro a los tres responsables materiales del hecho, quienes por el momento se encuentran prófugos.
Quiroga habría pedido prestado a un familiar la Fiat Fiorino que es tomada por cámaras en Chacabuco y Laprida, a una cuadra de donde vive Cabrera, momentos antes de producido el ilícito.
Además, el mencionado tenía domicilio a metros de Andrés Cabrera, padre del secuestrado y en los allanamientos producidos en su casa, ubicada en calle Necochea 2752, se secuestraron varios elementos entre ellos una caja de guantes de látex. De los testimonios recolectados se dio cuenta que los secuestradores tenían colocados en sus manos elementos de igual característica, cuando concretaron el ilícito.
En el caso de Soto, fue apresado al momento de buscar el dinero que como respuesta al pedido de los secuestradores, la esposa de Cabrera dejó en terrenos del ferrocarril, aledaños a calle Vélez Sarsfield y Chacabuco.
Si bien originalmente el pedido era liberar a Cabrera a cambio de 200 mil dólares, la esposa del secuestrado sólo dejó a los delincuentes la suma de 1000 dólares.