El Presidente minimizó esta acción de las fuerzas brasileñas y aseguró que “no había nada irregular”.
Luego del escándalo que se generó en Brasil con la compra del gobierno de 35 mil píldoras de viagra para el ejército, el presidente, Jair Bolsonaro, se refirió a este hecho asegurando que “no había nada irregular”.
Además, culpó a la prensa de tener mucha mala fe y ser ignorante en el tema.
Bolsonaro indicó que la compra de estas pastillas son para el tratamiento de enfermedades. ”Las Fuerzas Armadas compran el Viagra para combatir la hipertensión arterial y las enfermedades reumatológicas”, justificó el mandatario. El tribunal de cuentas del Estado investigará al Ministerio de Defensa para asegurarse de que no hubo sobreprecios.
Además, minimizó la compra del remedio para la disfunción eréctil diciendo que “no era nada”. “Fueron treinta y pocos mil comprimidos para el Ejército, diez mil para la Marina, y un número que no recuerdo para la Aeronáutica, pero debe sumar un total de cincuenta mil comprimidos. Con todo respeto, eso no es nada”, remarcó Bolsonaro.
El mandatario remarcó que la compra fue hecha porque dichas píldoras contienen sildenafil e indicó que se repartían entre los efectivos de las fuerzas brasileñas. “La cantidad es para los efectivos de las tres fuerzas, obviamente, mucho más usado por los inactivos y pensionistas”, señaló.
Esta noticia se había dado a conocer el lunes pasado cuando el diputado Elias Vaz reveló la información tras haber pedido una solicitud en el Portal de Transparencia Gubernamental. Una vez aceptada la solicitud, el congresista pudo conocer que se habían comprado las 35 mil pastillas de viagra.
El Ministerio de Defensa se respaldó de esta compra con el mismo argumento que el presidente Jair Bolsonaro. Desde allí, aseguraron que la compra fue para favorecer “al tratamiento de pacientes con hipertensión arterial pulmonar” porque el medicamento puede funcionar como un broncodilatador.