Los empresarios sostienen que si Nación no deposita los subsidios antes del lunes, no podrán pagar el aumento a los choferes.
Así lo advirtió este lunes el presidente de la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap), Gerardo Ingaramo: “Esperamos la transferencia. Si no llega el lunes 6 de junio, no se podrá cumplir con el pago de salario con aumento”, avisó. De no concretarse, los empresarios señalaron que solo podrán cubrir el salario como se estaba pagando, es decir sin incremento.
Es que provincia viene pagando su cuota por adelantado, por lo que se espera que cobren junio durante los primeros días del mes, pero Nación lo hace a mes vencido, por lo que teóricamente ese dinero correspondiente a mayo debería llegar en los próximos días. “Llamo a la reflexión a los funcionarios nacionales que, directamente, no nos atienden”, reclamó.
Y agregó: “El compromiso de Nación fue girar los dos meses adeudados, pero sólo lo hicieron con uno y no sabemos por qué. Ahora estamos viendo con la provincia cuánto podrá aportar, porque si no se puede pagar con el aumento, seguramente habrá un conflicto”, adelantó en referencia a cómo sería recibida esta noticia por la Unión Tranviarios Automotor (UTA).
Los montos de aumento acordados con los conductores son un 27 por ciento en mayo, otro 11 en junio y finalmente en agosto otro 12 por ciento, lo que llevaría los salarios básicos de 100 a 150 mil pesos, más viáticos, antigüedad y otros ítems. Según Ingaramo, el costo de ese incremento para todo el país representa unos 15 mil millones en los 6 meses. “Con lo que aportan Nación y provincia no llegamos ni a la mitad”, indicó.
Adelante
Desde la provincia aclararon que aportan lo que se comprometieron por convenio con Nación, que estipula un porcentaje de lo que desembolsa el gobierno central. Para el primer trimestre, esa cifra fue de unos 3.200 millones para todo el interior, que ahora subió a 3.500 millones y obligó a elevar la cuota de la provincia.
“Podemos evaluar alternativas, pero hoy estamos pagando lo que corresponde. Si la mejora de Nación implica que aumente nuestro porcentaje, lo haremos”, respondió el secretario de Transporte de la provincia, Osvaldo Miatello.
Además, el funcionario adujo que los empresarios han recibido, en lo que es transporte interurbano, un 44 por ciento de aumento de tarifa en lo que va del año. En tanto, a nivel urbano los municipios de Rosario y Santa Fe les dieron recientemente una suba de 10 pesos, que se suma a la que habían tenido en febrero de 45 a 59.
“Entiendo que la situación es complicada, que los costos de gasoil y neumáticos se han ido al diablo y son más caros que en Buenos Aires, que no se puede renovar unidades y la paritaria influye. Pero la paritaria la firmaron los empresarios, no la provincia ni la Nación. Nosotros seguiremos adelantando, pero nuestra pelea es que el gobierno nacional ponga más”, expresó Miatello.
Es que mientras intenta resolverse la preocupación en lo inmediato, desde el interior distintos actores políticos siguen trabajando en una ley federal de transporte que contemple un reparto equitativo de subsidios. La idea es que haya un equilibrio que permita un buen funcionamiento del transporte para que no sigan aumentando las tarifas, y evitar que la brecha sea mayor. Hoy en CABA el boleto está 18 pesos, y 69 en el interior.
En el Congreso hay dos proyectos de ley, de los senadores Alejandra Vigo y Sergio Uñac, que traen beneficios para las provincias. Plantean una bolsa común de subsidios, que sume todo lo que hoy recibe el AMBA y el interior, y que luego se reparta en base a cantidad de colectivos, trabajadores y kilometros recorridos. Es de esperar que todos los gobernadores acompañen la iniciativa, que se plantea modificar la distribución para este mismo año.
“Alguna respuesta tiene que haber. Queremos que se debata y se mejoren los fondos para el interior. No puede ser que exista esta diferencia en el precio del boleto. Todo el interior quiere que le den mas plata, ya sean del PRO, del radicalismo o el peronismo. No hay matices entre los partidos sobre este tema, todos pensamos que es una barbaridad lo que pasa”, se quejó el secretario de Transporte.
En cuanto al anuncio de la quita de subsidios a los colectivos porteños para dárselo a líneas que operan en las provincias, dijo que “vendría bien” pero pidió esperar a ver cómo termina esa disputa, cómo se le saca a la Ciudad de Buenos Aires y cómo se deriva al interior, además de la forma en la que se hará la distribución. “Capital es una porción del AMBA, son solo 32 líneas. Lo grueso está en lo interjurisdiccional entre provincia y capital, que involucra a 10 mil colectivos que entran y salen. Pero es un buen camino”, opinó.
Fuente: La Capital