“The Reds” se quedó con la edición 150 del certamen más antiguo del mundo.
Liverpool se proclamó campeón de la FA Cup tras vencer en los penales al Chelsea por 6 a 5, luego de igualar 0 a 0 en un partido atractivo en el cual fue ampliamente superior a su rival.
El elenco conducido por Jürgen Klopp tuvo un comienzo arrollador, en el cual se destacó el aplastante nivel del colombiano Luis Díaz, quien fue imparable para todo el conjunto “blue”.
Por medio de la presión alta o media, con los volantes Henderson, Keita y Thiago Alcantara como banderas, dominaron la posesión del balón y ahogaron a un rival que poco pudo hacer a lo largo del encuentro.
El Chelsea resistió como pudo e intentó contratacar de la mano de Romelo Lukaku, quien pudo haber cambiado la historia del pleito
antes del cierre del primer tiempo.
Ya en el complemento, fue todo un repertorio del Liverpool que se llevó por delante a su rival, el cual tuvo como figura a su arquero, Mendy, y los palos a su favor, como las dos ocasiones en que Díaz estrelló la pelota en los mismos.
El cierre del encuentro tuvo al elenco de Thomas Tuchel observando el reloj para que finalice el tiempo regular, en el cual no la paso para nada bien pese a que su rival perdió a uno de sus mejores delanteros, Mohamed Salah, por una lesión.
Ya en el tiempo suplementario, Chelsea tomó el dominio del encuentro ante un Liverpool que ya no respondía físicamente ante el desgaste que realizó y los compromisos previos que sumó -el cual le permite ser finalista de la Champions League-.
Si bien perdió la tenencia de la pelota, los “The Reds” no sufrieron ante un rival que vio la definición desde los 12 pasos como un buen negocio ante el escenario que se le había presentado en el tiempo regular.
En los penales, Azpilicueta falló para el Chelsea, pero Mendy detuvo a Mané su ejecución -que significaba el título para el Liverpool-. La tanda continuó hasta que Alisson detuvo el lanzamiento a Mount y Tsimikas le dio el trofeo al conjunto de Klopp.