El crimen del adolescente de 13 años golpeado y quemado en Merlo horroriza. El bullying no se detiene. Golpizas, acoso sistematizado en redes sociales y muertes.
El atroz homicidio del chico Nicolás Cernadas en Merlo, golpeado y luego quemado vivo, en un episodio que tiene detenidos a dos adolescentes de 14 y 17 años, coloca al bullying nuevamente como una problemática que mantiene en alerta a la población.
Se sabe que la víctima de 13 años venía sufriendo acoso por parte de los sospechosos, que habrían planeado fríamente el crimen. Este caso lamentablemente no es aislado. Un estudio sostiene que en el último año se registraron más de 7.000 ataques salvajes en el país por situaciones de bullying.
La cifra surge de un relevamiento llevado a cabo por la ONG Internacional Bullying Sin Fronteras, donde quedó acreditado que en el mismo lapso se registran más de 200 muertes de chicos y adolescentes derivadas de bullying, por ataques directos pero también por suicidios, como derivación del acoso permanente, tanto en ámbitos escolares, como en otros espacios y por supuesto en redes sociales.
30.000 chicos y chicas con miedo
Asimismo, se indicó que al menos 30 mil chicos y chicas, viven con miedo por el ciberbullying y por una corriente de mensajes de odio que se ha instalado, principalmente en las denominadas ‘4 Tóxicas’: Twitter, Facebook, Instagram y WhatsApp.
“Desde octubre del año pasado, nos vienen llegando miles de testimonios diarios, sobre chicos y chicas de entre 11 y 25 años que viven con temor, a raíz de que son amenazados, amedrentados, insultados o directamente instigados a quitarse la vida; principalmente en las redes sociales de Instagram, Facebook, WhatsApp y Twitter. Lamentablemente en el curso de 2022 se han producido suicidios de jóvenes en todo el país, desde San Juan, Mendoza y San Luis hasta el Conurbano bonaerense, la Ciudad de Buenos Aires, Rosario, Córdoba, Formosa, Misiones, Corrientes, Chubut, Tierra del Fuego, Santa Cruz, Neuquén y Río Negro”, dijo Javier Miglino, abogado especialista en Derechos Humanos y Protección de la Niñez y Director Mundial de Bullying Sin Fronteras.
El terrible crimen de Merlo
“Pero el odio y el ciberbullying no solo matan, instigando a la víctima a suicidarse. Matan directamente por homicidio, tal como ocurrió con el horrendo crimen de un niño de apenas 13 años: Nicolás Alexander Cernadas, que el lunes último fue hallado asesinado y semi calcinado en un descampado de la localidad bonaerense de Mariano Acosta, Merlo. Sus asesinos, dos jóvenes de apenas 14 y 17 años, según se desprende de los chats de Instagram en poder del Fuero Penal Juvenil de Morón, muestran como de a poco se fue escalando de una situación de celos a un escenario de odio. De ahí se pasó al crimen”, dijo Miglino.
“Los padres deben estar atentos a las redes sociales de sus hijos y al comportamiento que demuestran luego de participar de una publicación o un chat. Si tienen preocupaciones o dudas sobre una situación que puede resultar peligrosa, siempre es bueno recurrir a la justicia. O si lo prefieren pueden contactarnos en: [email protected] Si la vida y el bienestar de los chicos está en juego, todos debemos involucrarnos para defenderlos”, explicó Miglino.
El resultado preliminar de la autopsia determinó que la muerte de Cernadas se produjo unas 24 horas antes del hallazgo, posiblemente el domingo por la tarde, y que la causa fue un “paro cardiorrespiratorio traumático ocasionado por lesión alveolar difusa y por energía calórica”, es decir que murió por los cortes y tras ser prendido fuego aún con vida. Fuentes policiales y judiciales de la Provincia de Buenos Aires, aseguraron al Equipo Multidisciplinario Internacional de Bullying Sin Fronteras, que la hipótesis más firme apunta a que el crimen se produjo “por placer, diversión y el odio”.
Fuente: Diario Popular